*Garantizan un servicio más eficiente y seguro porque son de la más alta tecnología, señala Secretaría de Salud
La Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado renovó las 14 máquinas para el tratamiento que otorga en el Centro Estatal de Hemodiálisis (CEH) a pacientes con enfermedad renal, con lo que se garantiza un servicio más eficiente y seguro porque se trata de equipos con la más alta tecnología.
Estas nuevas máquinas, construidas en Suecia e importadas de Estados Unidos, permiten más seguridad para el paciente, ya que vienen con un sistema de alarma y de seguridad que evita en todo momento que el paciente corra algún riesgo durante su sesión de hemodiálisis.
En acto donde la secretaria de Salud, Leticia Guadalupe Delgado Carrillo, puso en marcha la operación de estas nuevas máquinas, el director del CEH, Luis Antonio Bermúdez Aceves, dijo que otras ventajas de los nuevos equipos es que reducen costos y son amigables con el medio ambiente, ya que los químicos que utiliza son a base de cítricos.
Agregó que también hay un ahorro de tiempo porque cuando el paciente llegue a la hora citada, la máquina va a estar lista para el siguiente usuario, de tal manera que cada equipo recibirá cuatro pacientes en horarios distintos durante el día.
Al respecto, el proveedor expuso que con las nuevas máquinas hay recortes en los tiempos de atención, toda vez que hacen desinfecciones con un solo agente químico, lo que permite economizar tiempos.
Asimismo, el tratamiento es personalizado, de tal manera que si se requiere extraer más líquidos de los pacientes, se hacen modificaciones para que se hagan en forma más segura y controlada.
La máquina tiene un ultra-filtro por donde va a pasar el agua, lo que garantiza la seguridad en los pacientes porque tiene un mecanismo (omosis) que trata el agua para que sea pura e idónea para el tratamiento, reteniendo el agente o bacteria que pueda llegar.
El director del CEH dijo que esta renovación de máquinas no tiene impacto en el bolsillo del paciente porque no hay un incremento en el costo que tienen que cubrir, por lo que seguirán pagando 638 pesos por cada sesión, absorbiendo la Secretaría de Salud el resto del costo, cuya totalidad asciende a los mil 500 pesos.