*Carlos Tejeda, de la UdeC, asistió I Encuentro de Cambio Climático y Transición Energética en las instituciones educativas, el cual se realizó en días pasados en la Universidad de Guadalajara.
El experto en impacto ambiental de la Universidad de Colima, Carlos Tejeda González, al hablar sobre el I Encuentro de Cambio Climático y Transición Energética en las instituciones educativas realizado hace días en Guadalajara, comentó que “es una buena estrategia involucrar a las universidades en esta visión del actual gobierno federal, para aprovechar no sólo el papel que tienen en cuanto a recursos humanos e investigación, sino también que sean las pioneras en esta transición energética que debe emprender el país si se quiere lograr la soberanía energética”.
Tejeda González dijo que el encuentro en Guadalajara destacó la necesidad de capacitar al personal de las universidades en estos temas, así como de buscar fuentes de financiamiento, si es que se quiere llevar a cabo exitosamente el proyecto de transición energética.
Lo primero que debe hacerse, adelantó, es realizar un diagnóstico integral de la universidad en las diversas asignaturas, planteles, dependencias y centros de investigación, sobre los avances y prácticas en el cuidado al medio ambiente para, posteriormente, hacer un análisis y una propuesta del camino que quiere seguir la UdeC frente a dicha transición.
Cada universidad, añadió, deberá analizar el contexto de su región para determinar qué tipo de proyectos son los más viables y cuáles pueden tener un mayor impacto.
Dijo que Colima tiene una gran riqueza de recursos naturales que potencialmente son fuentes de energía alternativa, como la radiación solar, la energía del mar y, en menor medida, la eólica: “En la UdeC hay expertos en cada una de las áreas que pueden ayudar en un trabajo integral en beneficio de los propios universitarios y de la sociedad”.
Al comentar los 30 puntos mencionados durante el encuentro para llevar a cabo la transición energética en el país, dijo: “es en las Instituciones de Educación Superior donde recae principalmente la producción de ciencia, tecnología e ingeniería para la creación de energías renovables. Hay que recordar que no somos una universidad tecnológica, pero varios de los temas de desarrollo mencionados, sí los trabaja la UdeC”.
En este sentido, dijo que las universidades deben estar atentas a estos lineamientos, pues los proyectos que atiendan dicha política nacional obtendrán financiamiento.
Soberanía energética, definió Juan Carlos Tejeda, se refiere a no seguir dependiendo de los recursos de importación, que son en un mayor porcentaje combustibles fósiles como el petróleo, carbón y gas, ampliando por el contrario el uso de energías alternativas como la hidroeléctrica, eólica y fotovoltaica, que representan sólo el diez por ciento de las fuentes energéticas utilizadas en el país actualmente.
“Como nada más tenemos reservas probadas de petróleo para los siguientes ocho años, necesitamos invertir en esta transición energética y producir energía eléctrica propia mediante formas alternativas, así como disminuir el consumo de hidrocarburos y dejar de depender del gas natural que nos mandan de Texas y otros países”, agregó.
Otro aspecto importante de la soberanía energética, finalizó, “es que México cuente con desarrollo tecnológico propio y no dependa de expertos, infraestructura o equipamiento del extranjero, si no, en diez, quince o 20 años estaríamos dependiendo nuevamente de lo que otros países más avanzados nos lleguen a mandar o asesoren”.