Calmar a un niño con el celular le impide aprender a calmarse por sí mismo

Las niñeras virtuales son las aliadas de los padres modernos, pero no ayudan al niño a manejar la ansiedad, ni mucho menos la autorregulación de sus emociones.

A las tabletas y teléfonos celulares por igual se les ha llamado recientemente -y a tono de broma-, “la niñera inteligente” o “el chupón digital”, pues aunque no lo creas, es el nuevo uso que muchos padres les están dando para distraer -o peor aún-, calmar a sus hijos en medio de un berrinche, o para que los dejen en paz mientras los progenitores realizan alguna otra tarea.

Para los ojos inexpertos, ver a un pequeño jugando con el celular de su mamá, mordiéndolo, o ver que se calma y deja de llorar cuando se lo dan, podría no significar nada, pero para psicólogos y expertos en desarrollo infantil, esta es una alerta que hay que atender.

Pero, ¿por qué tanto drama por algo tan normal? Inclusive puedes pensar que es exagerado de parte de los especialistas declarar que un aparato de este tipo es perjudicial cuando contienen tantos juegos y actividades tan atractivas.

Por eso quiero presentarte algunas ideas para que tú hagas tus propias conclusiones.

Los niños pequeños requieren atención de sus padres

En estos tiempos donde las nuevas tecnologías nos sorprenden a diario, podemos olvidar que sin importar todos los avances que se logren, los seres humanos debemos seguir los procesos biológicos naturales necesarios para un sano desarrollo.

Y parte de ese desarrollo natural y normal, es que los padres pasen tiempo con sus hijos.  Hablar, jugar, dormir, discutir, comer y todo lo que se trate de una relación normal, los niños lo necesitan.

Ningún aparato electrónico puede suplir la atención que un padre puede brindar a su hijo en cualquier edad.

También requieren de tiempo para jugar y tener actividades físicas

Todos los niños, por no decir que todos los seres humanos, requerimos de movimiento para mantenernos saludables; y los niños en desarrollo requieren en particular de juegos al aire libre, caminar, escalar, caerse y aprender a levantarse, explorar y descubrir, experimentar, y sentir todo tipo de texturas, sabores, olores. Una tableta o un celular jamás podrán dar estas experiencias de vida.

Un pequeño aprende a manejar la frustración y la tolerancia con experiencias

Por más que nos neguemos a aceptarlo, debemos entender que la tolerancia se desarrolla como lo hace un músculo, y que la frustración se supera conforme lo intentamos una y otra vez hasta lograrlo.

Nuestros niveles de paciencia se desarrollan enfrentando todo aquello que nos desafía; no son cosas que solo aparezcan y ya, son virtudes que se logran con paciencia y al enfrentar retos y desafíos de la vida diaria. Y un aparato tecnológico no es el mejor camino para lograrlo.

La satisfacción y gratificación instantáneas no ayudan a que se den los procesos madurativos necesarios 

En los últimos quince o veinte años, la vida a tomado un giro tan rápido que nos ha tomado desprevenidos en muchos aspectos. Hemos comenzado a vivir  de una forma muy rápida en todo sentido: comida rápida, servicios express y placer o gratificación rápida e inmediata.

Los niños (y los adultos) buscan reconocimiento inmediato, premios al instante, así como gratificaciones por “mover un dedo”. Por lo tanto, la paciencia, la espera y el esfuerzo prolongado para conseguir algo o cumplir una meta, son ideas del pasado, dando como resultado, espíritus débiles y nula fuerza de voluntad; de ahí el surgimiento de la famosa «generación de cristal».

Los dispositivos electrónicos fascinan al niño, pero no le enseñan a auto regularse

Observa a un pequeño de 2 o 3 años cuando hace un berrinche. Nada lo puede sacar de su drama; pero entonces la madre le da una tableta, el niño se calla de inmediato y se pierde en lo que observa fascinado. Puedes ver cómo mueve su mano, y en algún momento sonríe, y mientras su vista sigue atenta al aparato, la madre piensa que ya todo está bien. Pero entonces, le retira el aparato y en 3 segundos el niño estalla nuevamente en llanto, igual o peor que la primera vez.

Los dispositivos calman al niño mientras los usan, pero en ningún momento le ayudan a aprender a auto dominarse.

¿Qué podemos hacer?

* Evita que los  niños pequeños jueguen con dispositivos electrónicos antes de los 5 años

* No uses este tipo de aparatos para que dejen de llorar o te dejen de «molestar»

* Permite que tus niños disfruten actividades al aire libre

* Permite que los niños se aburran y busquen qué hacer

Te invito a leer más sobre berrinches y cómo ayudara los niños a auto regularse, toma más tiempo que dar una tableta, pero créeme, es mucho mejor para ellos pues estará aportando al desarrollo normal y natural de habilidades para la vida.

Con información en: https://www.familias.com/calmar-a-un-nino-con-el-celular-le-impide-aprender-a-calmarse-por-si-mismo/?fbclid=IwAR1gdEEszhXYyyh8zvuJnwXo4hQJH6ww-KtWiLGOnenM-_AFybHu9DK5M3w