Reconocen labor de los universitarios Antonio Enciso y Victoria Novelo

 

 

*En el marco del Séptimo Festival Mítica Comala “Literatura y artesanía: estética de los saberes tradicionales”, que se llevó a cabo en esa cabecera municipal.

 

Antonio Enciso Núñez, director del Museo Universitario de Artes Populares (MUAP) “Ma. Teresa Pomar” de la Universidad de Colima, fue reconocido por su trayectoria como promotor cultural en el marco del Séptimo Festival Mítica Comala “Literatura y artesanía: estética de los saberes tradicionales”, que se llevó a cabo en esa cabecera municipal.

 

Junto con Antonio Enciso, también se distinguieron las trayectorias de Victoria Novelo Oppenheim, fundadora y directora en su momento del Centro Nacional de Capacitación y Diseño Artesanal (CENCADAR) de la Universidad de Colima y Salomón Salazar, incansables luchadores del arte popular y de los pueblos indígenas.

 

El acto estuvo presidido por Efraín Angulo Rodríguez, secretario de Turismo con la representación del gobernador José Ignacio Peralta Sánchez; Jaime Flores Merlo, secretario de Educación; el propio Salomón Salazar Barragán, presidente municipal del Comala, y Sergio Morales Hernández en representación del secretario de Cultura, Carlos Ramírez Vuelvas, quienes hicieron entrega de un reconocimiento a los tres homenajeados.

 

Victoria Novelo, en nombre de sus compañeros, agradeció a las autoridades y organizadores “este sentido reconocimiento” a sus trayectorias. “En este pequeño pedazo de territorio he aprendido una gran cantidad de cosas, que me sirvieron para escribir el libro La tradición artesanal de Colima; procuré que quedara muy claro que Colima, además de producir sal, limones, hierro, coco, maravillosas flores y lava de volcán, es un sorprendente conglomerado de talentos en artesanías, productos relacionados con la vida y la cultura de Colima”.

 

Reiteró que “es necesaria una reivindicación del artesano y su trabajo como un arte que forma parte de la identidad y de la cultura de los pueblos”.

 

Además, se hizo un homenaje de la forma tradicional del pueblo de Suchitlán, con un enroce, el cual consiste en ofrecer una corona, una palma y un collar de pan elaborado por los artesanos de esta comunidad, como una manera de engalanar a las personalidades distinguidas.