El director general de la Comisión Federal de Electricidad, Enrique Ochoa Reza, informó ante la Tercera Comisión de la Permanente que las pérdidas técnicas y no técnicas en el 2012 por falta de modernización de infraestructura y por la cultura de no pago que incluye el uso de “diablitos”, de los “bypasses” y la falta de cultura de pago, el no cubrir sus consumos por cuestiones políticas como en el Estado de Tabasco, fueron del 16 por ciento, esto es 52 mil millones de pesos.
Y en la Zona Metropolitana del Valle de México, donde antes operaba una empresa distinta a la CFE, las pérdidas técnicas y no técnicas eran del 33 por ciento.
En cambio, entidades con condiciones económicas adversas, que sí pagan puntualmente su energía eléctrica, como Oaxaca y Michoacán. Las pérdidas técnicas y no técnicas de ambos Estados son por debajo del promedio nacional. De hecho, Michoacán es de los más bajos en ambas pérdidas en todo el país.
Ante senadores y diputados, en reunión de trabajo en el Senado de la República, el director de la CFE también les comunicó que el pasado 16 de junio fue el día que más consumo de energía eléctrica se tuvo en el país en toda su historia con 40 mil 693 megawatts.
Destacó que la capacidad instalada en el país es de 54 mil megawatts. Es decir, tiene suficiente capacidad instalada para atender la demanda histórica momentánea y la demanda creciente que se ha registrado año tras año, consecuente con el desarrollo económico del país.
Sobre el motivo de la reunión de trabajo: el aumento en los precios de las tarifas, el director general de la CFE dijo que en los últimos 19 meses, las tarifas eléctricas del sector industrial disminuyeron en todo el país.
Empero, a partir de un aumento en el costo del gas natural y del combustóleo en el último mes, es que para el mes de julio fue necesario aumentar las tarifas de energía eléctrica en el país, reconoció.
En tanto, la presidenta de la Tercera Comisión de la Permanente la senadora panista Mariana Gómez del Campo, consideró preocupante el aumento de las tarifas eléctricas por el impacto que tendrá en las familias y el desempeño de las empresas.
Recordó que el pasado día 3 del presente, la CFE, empresa productiva del Estado anunció el ajuste de tarifas para el sector industrial entre el 2 y 5 por ciento; para el sector comercial entre 5 y 7 por ciento y para uso doméstico de alto consumo de 6.8 por ciento. En tanto para el sector doméstico de bajo consumo no tendrá aumentos este año.
“Lo que nos preocupa seriamente es que este anuncio se da días después del incremento de los precios de las gasolinas y el gas, con lo que se acumulan y multiplican los costos de insumos fundamentales para las familias y las empresas”, señaló.
Y preguntó al funcionario cuáles serán los impactos para los hogares y para los sectores industrial y productivo del país? Además, la manera en que este incremento en las tarifas puede reflejarse en la inflación.
Recordó que hace unos días el Banco de México incrementó en 50 puntos base las tasas de interés, reflejo de las presiones inflacionarias; y el peso ha llegado a niveles históricos en su devaluación, lo que complica las operaciones del sector productivo que depende de las importaciones para la generación de sus bienes y servicios.