*La Facultad de Arquitectura y Diseño organizó el panel “Conversar por la ciudad: vivienda, resiliencia y género”, como parte del Día del Urbanismo.
El incremento de viviendas, sin una adecuada planeación, es uno de los errores que se comenten en la actualidad, ya que se construyen en zonas poco adecuadas y se diseñan espacios que no son apropiados para las personas, coincidieron Liliana Juárez, Raymundo Padilla y Reyna Valladares, quienes participaron en el panel “Conversar por la ciudad: vivienda, resiliencia y género”.
Como parte del Día del Urbanismo, la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad de Colima y el Consejo Nacional de Estudiantes de Arquitectura organizaron este panel, donde se abordaron temas esenciales sobre la vida en las ciudades.
De acuerdo con los académicos, la construcción actual de viviendas no cumple ni resuelve las demandas de las personas; por ejemplo, se encuentran en zonas apartadas, los espacios son reducidos y muchas veces no se sabe si el lugar está expuesto a fenómenos naturales.
“La vivienda actualmente no está resolviendo las situaciones más sentidas, pero además, su proceso de construcción se ha vuelto complicado; se dice que está planeado, pero realmente se está expandiendo y absorbiendo suelo natural, condición que desequilibra la situación sustentable; tendríamos entonces que buscar un equilibrio para tomar una mejor decisión de cómo y por dónde comenzar a construir esta vivienda”, dijo Liliana Juárez.
En ocasiones, comentó Raymundo Padilla, “se piensa en la ciudad y la vivienda en el sentido que se mantiene en el desarrollo armónico, pero no es así, sobre todo en Colima, donde estamos expuestos a agentes naturales que son potencialmente peligrosos y que en reiteradas ocasiones se ha registrado que puede transformar la ciudad. Si tú no tienes armado un tejido social sólido en el momento que se presenta una amenaza natural destructiva, desaparece tu ciudad. En Colima ha habido eventos desastrosos donde el éxodo ha sido una opción clara. Por ello debemos crear conciencia de que necesitamos ciudades resilientes”.
Además, agregó Reyna Valladares, “se requieren ciudades en las que se piense en zonas habitacionales seguras, con enfoque de género, lo que implica seguridad, cercanía, porque la ciudad ha sido creada bajo un enfoque donde todo es vivienda o industria o comercio, donde el hombre trabaja, mientras que el enfoque de género implica que tanto el hombre y la mujer puedan ir al trabajo y por sus hijos. Lo que se busca con el enfoque de género es la seguridad, la cercanía y la igualdad de las representaciones de la ciudad”.
Los académicos coincidieron en que para lograr ciudades y viviendas adecuadas se necesita de la participación de todos, pues es en la vivienda donde se forman familias y se crean mejores ciudadanos y es en la academia desde donde se puede iniciar la toma de decisiones o llamar a quienes toman decisiones para atender los problemas de una mejor manera.
“Si ustedes como estudiantes consideran los temas de ciudad y comienzan a poner de su parte harían una gran diferencia”, finalizó Liliana Juárez.
