+La seguridad social no se negocia, se construye, asegura Francisco Miguel Aguirre +Colima, uno de los cuatro estados que no reforma desde hace 50 años +En porcentaje respecto a su presupuesto de egresos, somos el estado que gasta la mayor cantidad de dinero para las pensiones de servidores públicos
El actuario Francisco Miguel Aguirre, aseguró que si no se reforma el Sistema de Pensiones del Estado, no habrá dinero que alcance para pagar a los trabajadores en retiro, toda vez que si bien pueden tener derecho a sus jubilaciones, “nadie está obligado a lo imposible, si no hay recurso no se pueden pagar las pensiones”.
El director de Evaluaciones actuariales del norte S.C consideró que en una reforma al régimen de seguridad social, tanto el sector patronal, como el de los trabajadores, “deben ser aliados”, toda vez que la seguridad social no se negocia, sino que se construye.
En la participación que tuvo en los foros ciudadanos que organizó el congreso del estado en torno al proceso de reforma que realiza sobre el régimen de pensiones, se dijo preocupado porque Colima es uno de los cuatro sistemas de pensiones que desde hace más de 50 años que no realiza una reforma en la materia; “prácticamente todos los estados, todas las universidades y muchos municipios del país y otros países, han reformado”.
Aseguró que en Colima la reforma no se ha realizado por cuestiones políticas y advirtió que si estos trabajos se hubieran realizado hace 20 años que se comenzó a advertir el problema, “las modificaciones hubieran sido muy pequeñas, porque entre más avanza el tiempo, más drásticas tienen que ser las modificaciones”.
Señaló que en la actualidad, Colima es el estado que en porcentaje respecto a su presupuesto de egresos, gasta la mayor cantidad de dinero para las pensiones de servidores públicos, “pero además, esta cantidad va a seguir creciendo si no se hace esta reforma”.
El actuario dijo que este problema seguirá creciendo “y esto implica un riesgo financiero que se va a traducir en un riesgo social porque no va haber dinero que alcance. El trabajador sí tiene derecho a que le paguen, va a estirar la mano, pero nadie está obligado a lo imposible, si no hay recurso no se pueden pagar las pensiones”.
Detalló que la idea no es quitarles a los trabajadores, “sino transmitirles que si no hacen algo, no van a tener pensiones”.
Dijo que luego de ver las intervenciones de los líderes sindicales, “me di cuenta que no han interpretado bien (la reforma) pues todos los señalamientos que hacen, tienen respuestas”.
Confió en que las partes puedan llegar a un acuerdo en donde se garanticen las pensiones para los trabajadores, “pues seguridad social sin sustento económico es demagogia. Tienen que llegar a un acuerdo en donde se cuente con recursos para ello”.
Inicialmente comentó que los estudios realizados son resultado de la revisión de matemáticas financieras, probabilidades y estudios muy complejos para poder emitir un diagnóstico, por lo cual
Luego de señalar que son los actuarios oficiales de 27 gobiernos estatales, 37 universidades, entre ellas la de Colima, misma que ya se sometió hace algunos años a una reforma similar a la que se está planteando.
Agregó que también son los actuarios oficiales de los sindicatos más grandes del país como son el SNTE, Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios, Sindicato del Seguro Social, así como de otros sindicatos estatales, municipales y de empresas.
Advirtió que como actuario, no está del lado de los trabajadores, ni de los patrones, sino que se limita a dar información para que se tomen decisiones.
Al definir el concepto de pensión explicó: “nos juntamos la sociedad para apoyar a las personas que ya no pueden trabajar, esa es la definición de una pensión. La pensión no es un premio a la antigüedad por definición”.
Abundó que la pensión consiste en apoyar a las personas que ya no pueden trabajar por vejez, por invalidez, por fallecimiento o alguna otra causa.
En ese tenor, reconoció que si la edad de pensión se mueve a los 65 años, ahí están las pensiones por invalidez para cubrir esos posibles escenarios.
Explicó que la definición de seguridad social se resumen: “no debe haber pensión sin necesidad, ni necesidad sin pensión. Hoy otorgamos pensiones a gente que no las necesita, porque se pueden jubilar a los cuarenta y tantos años, pero no les damos a otros que se invalidan con menos años de los que marca la ley, por ejemplo”.
Luego de asegurar que en la actualidad en Colima está mal distribuida la seguridad social, el actuario Francisco Miguel Aguirre se mostró irónico cuando dijo que si bien todo mundo, sindicatos y autoridades dicen estar de acuerdo con la reforma, al momento que se les plantea mover la edad o antigüedad de los trabajadores, no aceptan.
Más adelante, consideró que en la actualidad el escenario de pensiones en Colima enfrenta dos problemas, uno estructural y otro administrativo, siendo el primero el más simple de entender, pues es el 95% del problema, en tanto que el segundo, consiste en recibir una aportación mínima durante 30 años de trabajo y luego pretender que se paguen 30 años más con salarios integrados.
Destacó que en una reforma como esta, deben equilibrarse tres factores: político, social y económico, pues si se favorece alguno por encima de los otros, terminan haciendo crisis. En ese tenor, dijo que tanto los gobernantes como los líderes sindicales, deben asumir la responsabilidad que les asignaron sus representados.