Darío Cervantes, investigador de la UdeC, visitó algunos destinos turísticos de Europa con la finalidad de conocer los modelos que utilizan en sus playas.
En semanas pasadas, Omar Darío Cervantes Rosas, investigador de la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad de Colima, realizó una estancia de investigación en tres países europeos con la finalidad de conocer la gestión, equipamiento y manejo de riesgos en algunas bahías, así como para enriquecer el proyecto de modelo de capacidad de carga y ordenamiento de playas turísticas.
Dicha estancia fue posible gracias al vínculo entre la Secretaría de Turismo y el CONACyT, y abarcó las bahías de Oliva, Gandia (España), Averio (Portugal), Florencia y la Toscana (Italia), para tener un punto de referencia con nuestro país y determinar los umbrales de uso de las playas y mantener así las condiciones ambientales óptimas de las bahías.
Durante este trabajo de campo, visitó pares académicos de las universidades de Cádiz, Politécnica de Valencia, de Florencia y Nova de Lisboa, quienes han participado en este proyecto desde hace años, esto es, en la evaluación del paisaje costero de algunas bahías de nuestro país.
Omar Darío Cervantes Rosas mencionó, en entrevista, que el modelo de capacidad de carga y ordenamiento de playas turísticas se encuentra en su tercera etapa; por lo tanto, esta estancia de investigación contribuyó en realizar ajustes al proyecto en los rubros metodológico y de resultados.
Sobre la metodología, dio a conocer que en Europa se trabaja con el diseño del estacionamiento para determinar y controlar el flujo de personas en las playas, con un promedio de 3.5 por coche; de igual forma, otro parámetro de utilidad son los apoyos en las playas que, a diferencia de las concesiones municipales en nuestro país, dan los servicios básicos así como la limpieza de la zona concesionada.
También dijo que, durante esta visita, revisó el color de la arena, la alimentación artificial de las playas, la distribución de las construcciones y los servicios en las bahías. Acerca de esto detalló que, en el caso de Italia, hay problemas de erosión debido a la construcción sobre dunas y el tope de los ríos por las presas, lo que origina la sedimentación de la arena; dicho problema se ha mitigado gracias a la alimentación artificial con grava.
Sobre España, dijo que las playas son arenosas; no obstante, también presentan problemas de construcción sobre las dunas, en las cuales se han implementado proyectos para el rescate de estas zonas.
Sobre las bahías nacionales, el investigador manifestó que “no hay playas más bonitas que otras, sino que tienen diferentes fenómenos que deben tratarse”. Mencionó algunos ejemplos en el Pacífico como son Mazatlán, que tiene problemas graves de erosión debido a la construcción de hoteles en las dunas.
En Jalisco, continuó, “aún se pueden considerar algunas playas como vírgenes”. En cuanto a las bahías de Colima, como Miramar, dijo que cuentan con mucho potencial y que no hay problemas de erosión; no obstante, aseguró que hay desinformación sobre las corrientes de retorno, lo que significa un problema de seguridad que debe atenderse.
El investigador universitario expuso que, gracias a estas visitas, escribirá una serie de artículos respecto a la evaluación de los residuos, el color de la arena, escenarios costeros y, finalmente, la capacidad de carga. Posteriormente, junto con las instituciones involucradas, se establecerán las estrategias para que los usuarios tengan una experiencia satisfactoria en las playas, lo cual es un referente de competitividad en los destinos.
Para finalizar, Omar Darío Cervantes recalcó que, como parte del seguimiento a este proyecto, se realizará el segundo taller de transferencia el mes próximo, durante el cual se mostrarán estos resultados en la zona del Pacífico y Europa.