“Reconocemos el trabajo y sensibilidad que poca gente está dispuesta a hacer, de formar estudiantes increíbles, quienes sin duda alguna son personas extraordinarias, por eso fueron acreedores a esta beca”: César Romero, director del Grupo CIMA.
Esta semana, Becas Impulso CIMA benefició a 40 estudiantes del nivel superior de la Universidad de Colima, en ceremonia realizada en el Centro de Tecnología Educativa del campus Manzanillo.
Presidieron el evento el rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño; César Humberto Romero García, director general de Grupo CIMA; Ana María Gallardo Vázquez, delegada de Manzanillo; Camilo Alejandro García Morales, presidente de la Federación de Estudiantes Colimenses y Ana Lilia Moreno Osegueda, directora general de Servicios Universitarios.
El joven César Alejandro Quiñónez, egresado de la Facultad de Contabilidad y Administración de Manzanillo (FCAM) y quien ahora trabaja en Grupo CIMA, compartió cómo fue su ingreso a esta empresa cuando incluso aún no se había titulado, “Grupo CIMA apuesta por los jóvenes y por las y los estudiantes de la Universidad de Colima”.
Después, la alumna y beneficiada con una beca, Samantha Bravo, de la Facultad de Ingeniería Electromecánica, en representación de sus compañeros, agradeció a César Humberto Romero “por su visión y compromiso humano con la sociedad, a favor de que más jóvenes universitarios sigan construyendo su educación y formándose en una profesión”.
El apoyo que reciben, agregó, “impacta de diferentes formas en la vida de cada uno de los rostros que ven aquí el día de hoy; el resultado es claro: cumplir sueños, alcanzar metas y cambiar historias de vida, por ello es invaluable, y asumimos esta oportunidad y beneficio con alto compromiso y sentido de responsabilidad”.
Agradeció al rector “por promover una educación de calidad, una experiencia académica inolvidable y la oportunidad de crecer como personas y profesionales; a Ana Lilia Moreno por el acompañamiento en la gestión de la beca y a Luis Octavio Ríos Silva, docente, por animarlos a solicitar este apoyo.
En su intervención, el director de Grupo CIMA, César Humberto Romero, habló de la Inteligencia Artificial. Comentó que “una máquina puede hacer el trabajo de 100 personas ordinarias, pero nunca podrá hacer el trabajo de una persona extraordinaria”. En este sentido, destacó que “el reto que tenemos sociedad, empresas y universidad, es seguir formando personas extraordinarias, racionales y pensantes”.
Felicitó al rector “porque desde el sector empresarial se siente esa empatía, esa cercanía de los estudiantes y la sociedad. Reconocemos el trabajo y sensibilidad que poca gente está dispuesta a hacer, de formar estudiantes increíbles, quienes sin duda alguna son personas extraordinarias, por eso fueron acreedores a esta beca”.
Por último, comentó que “para muchos, tal vez la beca sea simbólica, pero para otros significa la comida y el transporte de un día”. Sobre esto, dijo que el gran motor de muchas personas es la carencia y que quienes suelen quedarse en sus zonas de confort suelen ser quienes sienten que lo tienen todo; “creo que el principal motor que tienen ustedes es la carencia, por eso siéntanse orgullosos de estudiar en la mejor escuela pública de México, la Universidad de Colima”.
Al cerrar la ceremonia, el rector Christian Torres Ortiz destacó la estrecha relación que existe entre la empresa CIMA, su director y la casa de estudios. Resaltó que el empresario es egresado de la UdeC y le agradeció “por las atenciones y compromiso con su alma mater, ya que pudo haber destinado este recurso a otras cosas; hay muchas necesidades actualmente, pero su elección fue construir un fondo de becas de manera permanente para estudiantes de educación superior en Manzanillo”.
Señaló también que este beneficio genera un compromiso y objetivos de vida en las y los estudiantes, quienes se comprometen a concluir su carrera. Además, dijo, la educación superior no sólo permite el desarrollo de competencias profesionales, sino que desarrolla el pensamiento crítico y la posibilidad de entender mejor la situación que vive una comunidad y contribuir a la solución de problemas.
Finalmente dijo que, a diferencia de otros lugares donde el mercado de trabajo está casi saturado, “Manzanillo sigue aumentando las oportunidades de trabajo; cada vez más empresas buscan a egresados para sus vacantes. Sigan esforzándose para cumplir sus metas, ustedes han hecho un gran esfuerzo y hoy tienen ese reconocimiento”.
Las 40 becas, con un valor total de 120 mil pesos, fueron entregadas a estudiantes de las facultades de Comercio Exterior, Contabilidad y Administración (Manzanillo), Turismo y Gastronomía, Ciencias Marinas e Ingeniería Electromecánica.