Como parte del festival In Memoriam, dedicado al maestro J. Jesús Frausto López.
Como parte del festival In Memoriam, dedicado a J. Jesús Frausto Zamora, en estos días se realizó en Nogueras la charla “Música y colores. Miguel Bernal Jiménez y Alejandro Rangel Hidalgo”, en el que participaron María Emilia Rangel Brun, directora del Museo universitario “Alejandro Rangel Hidalgo” y sobrina del pintor colimense; Mónica Barajas, responsable de la galería de dicho museo y Gabriel de Jesús Frausto Zamora, director de los Niños Cantores de la Universidad de Colima.
Mónica Barajas inició la charla recordando que Alejandro Rangel fue un pintor, coleccionista, diseñador, ilustrador gráfico y escenógrafo mexicano; “su primer empleo fue como ayudante de arquitecto y sus comienzos en el arte fueron con pintura de agua sobre papel: tenía factura, es decir, calidad o trazo impecable en todo su trabajo como arquitecto, aunque era un pintor”.
Maria Emilia recordó la etapa formativa de Rangel Hidalgo al lado del maestro Rafael Heredia, así como los aprendizajes previos que lo llevaron a convertirse, “como afirmara Guillermo García Oropeza, en un híbrido genial de pintor de mano libre y habilísima, de colorista sutil y disciplinado dibujante de arquitectura, y esto lo hace diferente de los pintores que son sólo pintores”.
Para profundizar sobre la vida de Miguel Bernal Jiménez, compositor originario de Michoacán, Frausto Zamora dijo que “en el mundo musical es conocido como el eminente maestro Miguel Bernal, que realizó sus estudios superiores en el Pontificio de Música Sagrada en Italia y fue el primero de los estudiantes en hacer tres magisterios: en canto gregoriano, órgano y composición musical; era un músico muy completo”.
El panel coincidió en que “el destino juntó a estos dos genios”, que en vida tuvieron una amistad cercana, que les permitió realizar numerosos proyectos. Sobre la relación entre ambos artistas con el maestro J. Jesús Frausto López, Gabriel de Jesús comentó que “Miguel Bernal invitó a Romano Picutti, director de los Niños Cantores de Viena, para hacer un proyecto similar en Morelia y es así como nacen los Niños Cantores de Morelia”, donde él comparte sus técnicas”.
Alejandro Rangel, Picutti y Miguel Bernal trabajaron juntos cuando en Colima se fundó el coro de los Niños Cantores, que hacía servicios para la catedral en 1940. En 1971, la iglesia ya no pudo sostener el coro y se lo donó a la Universidad de Colima, porque era el único vestigio del arte musical y coral. La UdeC lo aceptó e invitó a dirigirlo a J. Jesús Frausto López.
En este sentido, Gabriel Frausto puntualiza que, gracias a la amistad que había entre su padre y Alejandro Rangel, este último diseñó los primeros vestuarios de pastorcitos, en el año 1993, durante el gran evento de apertura del Hotel América, para una gala navideña.
En el conversatorio también abordaron los pormenores de otra colaboración importante entre Miguel Bernal y Alejandro Rangel. Se trata de la película de Walt Disney “Los tres caballeros” (1944), donde sus personajes representan a tres países de América.
Por último, adelantaron que están preparando un evento llamado Las Jamaicas, que incluye música, así como bebidas y comidas típicas, para celebrar los cien años del natalicio de Alejandro Rangel.