Las haciendas son parte de la cultura mexicana que, con el tiempo hemos conocido a partir de la investigación de historiadores, trabajos que deben ser difundidos para conocimiento de la población y fomento de su identidad mexicana, así lo dijo Liliana Benavides, licenciada en comunicación social por la Universidad de Colima, con experiencia en la producción y especializada en producción documental por la Dirección General de Televisión Educativa de la Secretaría de Educación Pública.
Toda hacienda era una unidad de producción agrícola, donde no solo se producía lo que vendía fuera, sino lo que consumían los que habitan en ella, estaban constituídas por un casco, una casona, donde había habitaciones para la familia, pero también cuartos de instrumentos de labranza, silos para almacenar cosechas, un templo, la casa de raya, las casas de los peones y por supuesto las hectáreas de tierra de trabajo.
Hablemos de las haciendas en Colima, ubicada al norte de la ciudad de Colima, en el municipio de Cuauhtémoc encontramos una hacienda muy antigua que lleva por nombre Chiapa, data de al menos el año 1524, anterior a esta fecha, era Aquizapán, pueblo de indígenas convertido a encomienda después de la llegada de los españoles.
Una encomienda era una instrucción del rey de España a algún señor español, para que se encargara de cuidar del pueblo, de la producción y de la conversión de su gente al cristianismo, en este lugar, Aquizapán, 5 mil hectáreas fueron otorgadas en encomienda a un señor de apellido Carrillo.
Por aquellas fechas se sembraba en el lugar maíz, frijol, jícama y árboles frutales, Hernán Cortés introdujo la caña a mesoamérica, así que en 1524, ya convertida en encomienda y por la altitud y la región del lugar, se comienza a sembrar la caña de azúcar, años más tarde también se siembra la papa.
El primer trapiche del que se tiene registro es 1549, lo que significa que a partir de esa fecha se comenzó la producción de piloncillo y después de alcohol.
En 1839 deja de ser encomienda y se convierte en hacienda, la ponen a la venta y es adquirida por Manuel Álvarez Zamora, primer gobernador del estado, la habitó 30 años hasta su muerte, después la trabajó su hijo Manuel hasta vísperas de la revolución, de 1857 a 1910, en este año la hacienda la pasa a su hijo Miguel älvarez García “Capacha”, papá de nuestra primera gobernadora Griselda Álvarez Ponce de León, se la quedó hasta el reparto agrario en 1932 y acabó perdiéndola.
La información obtenida para la realización de este documental se obtuvo de las entrevistas de Jorge Peralta Cabrera, propietario actual y de la maestra historiadora Mirtea Cepeda Acuña, a quienes agradezco infinitamente.
Este documental puede ser visto por Canal 12 en la serie documental “Haciendas”.
