La película del director Matías Meyer es protagonizada por Ilse Salas, Ludwika Paleta, Leonardo Ortizgris y Andrés Almeida.
Llega Amores Modernos este 7 de agosto a Guadalajara; convirtiéndose en la primera película mexicana que estrena en salas comerciales, tras los cierres ocasionados por la pandemia de COVID-19.
CIUDAD DE MÉXICO, 7 de agosto de 2020.- El reencuentro de una familia con problemas aparentemente irreconciliables es el tema central de Amores Modernos (2019), la nueva película del realizador mexicano Matías Meyer, en la que se exploran las diferentes posibilidades del amor.
Protagonizada por Ludwika Paleta, Leonardo Ortizgris, Andrés Almeida e Ilse Salas, este largometraje llega a Guadalajara con preestreno el próximo viernes 7 de agosto.
Estrenada como parte de la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Los Cabos 2019, esta película habla sobre el distanciamiento físico y emocional de una familia mexicana que, luego de la sorpresiva muerte de la madre, debe aprender a convivir nuevamente, tejiendo así un reencuentro colmado de conflictos y sentimientos encontrados, pero también de mucha fraternidad.
“La familia nunca ha sido impecable. Esa impecabilidad siempre va con la mentira, con lo que no se dice o muestra, y lo que se ve en Amores modernos es justamente la fragmentación de cómo todas esas cosas que se han estado tapando durante años, en un solo día pueden salir a la luz”, comentó el actor Andrés Almeida en una entrevista.
Amores Modernos es una reflexión sobre todos los tipos de amor que coexisten en él ser humano: de hermanos, de padres, de hijos y de pareja. La intención del director Matías Meyer fue, de algún modo, revelar la naturaleza de las fisuras familiares. Y es que cada vez existen menos familias con núcleos tradicionales de padre-madre-hijos.
Con un guion ágil y un toque ácido y divertido que rara vez se ve en el cine mexicano, Amores Modernos consigue atrapar al espectador porque aborda temáticas con las que prácticamente cualquier familia puede empatizar, sin importar su condición social o económica: traiciones, rencores, secretos, prejuicios, culpas, desamores.
Ludwika Paleta, menciona: “Amores Modernos, es un película diferente, es algo a lo que no estamos acostumbrados ver. A veces nos vamos con la corriente de tantas cosas iguales que hay en cartelera, y vale la pena ver una película con una narrativa más natural ¿no? Esta es una película distinta, que viene de la necesidad de contar una o varias historias de una forma no muy convencional”.
“Finalmente, creo que todas las familias estamos cargadas de cosas que no nos decimos, de situaciones que juzgamos y criticamos del padre, el hermano o la mamá. A veces, el hijo puede criticar al padre y otras veces no, entonces, se va. Y poco a poco existe la necesidad de abrazarse y de la reconciliación. Y eso es bonito, de vamos a hacer las paces que necesitamos, no sólo a nivel familiar sino también a nivel social”, dijo el actor Leonardo Ortizgris.
Matías Meyer es uno de los directores más reconocidos del cine nacional. Es egresado del Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) y estudió Teoría del Cine en La Sorbona de París. En 2006 debutó como director con su cortometraje Verde (2006), con el que participó en el Festival Internacional de Cine de Morelia. Luego hizo largometrajes como Wadley (2008), Calambre (2009) y Los últimos cristeros (2011). Esta última tuvo un gran éxito mundial y fue reconocida con diversos galardones, como el Coup de Coeur en el 24° Encuentro Cinelatino de Toulouse, la Mejor Película de la Selección TV UNAM del 2° Festival Internacional de Cine UNAM (FICUNAM) y la Mejor Película en el 17° Festival Internacional del Nuevo Cine, en Croacia. Amores Modernos (2019) es su sexto largometraje.