La Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado informa sobre las medidas de atención y protección que pueden disminuir los riesgos de contagio del Covid-19 entre personas con discapacidad, atendiendo el tipo de esta misma que presente la población.
El área de Psicología del Departamento de Enfermedades Crónicas y Envejecimiento de la dependencia señala que los riesgos de contraer Covid-19 en personas con discapacidad se pueden ver incrementados debido a impedimentos para realizar medidas de higiene y dificultades para atender el distanciamiento social.
Otros factores de riesgo son la necesidad de tocar cosas para obtener información del entorno o para apoyarse físicamente y los que tienen que ver con el acceso información de salud pública, entre otros.
Por eso, para personas con discapacidad visual se recomienda hacer la limpieza del bastón de orientación con desinfectante; aumentar el lavado de manos, y mantener la sana distancia, orientándole mediante la voz para disminuir el contacto físico.
En relación a quienes tengan discapacidad auditiva se sugiere evitar contacto con el rostro al realizar gestos o señas; realizar la higiene de manos antes y después de manipular el aparato auditivo, y respetar la sana distancia al momento de comunicarse.
En cuanto a las que padecen discapacidad intelectual se recomienda explicar la importancia de las medidas preventivas como lavado frecuente de manos con agua y jabón, uso de gel alcoholado, en qué consiste la sana distancia, y proporcionarles información clara sobre la pandemia.
En el caso de las que tienen discapacidad motriz/física, es conveniente limpiar a diario cualquier dispositivo de asistencia, tanto al salir como al llegar a casa; evitar que otras personas toquen los dispositivos de asistencia y, en caso de ser necesario, realizar las medidas preventivas de higiene y limpieza de los mismos.
Y para las personas usuarias de silla de ruedas se aconseja usar guantes que puedan lavarse y/o desinfectarse y limpiar y lavar con más frecuencia la parte del cuerpo que sirva de apoyo para el desplazamiento.
Es importante la prevención y atención de la salud emocional de las personas con discapacidad con medidas de prevención, como ofrecerles información prudente y confiable; fomentar pensamientos positivos; promover actividades físicas y mentales, y favorecer la expresión de sus inquietudes, miedos y necesidades.