*Se busca sancionar con severidad violencia sexual en planteles escolares.
Alfredo Quiles Cabrera
El Congreso del Estado urgió a las autoridades estatales, principalmente a las educativas, a elaborar protocolos de seguridad y protección de infantes para impedir la violencia sexual en escuelas.
La diputada local Ana Karen Hernández Aceves propuso en el Congreso del Estado una iniciativa de reforma a la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes en nuestra entidad, tendiente a proteger a quienes son menores de edad y evitar que sean víctimas de violencia sexual en las escuelas.
La propuesta busca reformar conformar una instancia multidisciplinaria responsable que establezca mecanismos para la prevención, atención y canalización de los casos de maltrato, perjuicio, daño, agresión, abuso, violencia sexual o cualquier otra forma de violencia contra niñas, niños y adolescentes que se suscite y/o detecte en centros educativos.
Igualmente, para que se elaboren protocolos de actuación sobre situaciones de acoso, violencia escolar y violencia sexual que afecte a niñas, niños y adolescentes, para guiar la actuación del personal en las escuelas, y para quienes ejerzan la patria potestad, tutela o guarda y custodia.
La violencia sexual es todo tipo de acto sexual o tentativa de consumarlo, comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, acciones para comercializar o utilizar la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de su relación con la víctima, en cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo.
Medir la magnitud de la violencia sexual y del abuso sexual infantil no es tarea fácil pues se estima que respecto a este fenómeno no existen estadísticas confiables, pues es un problema que no se detecta a tiempo o es ocultado, sin llegar a la denuncia.
Dijo que como maestra sabe que la comunidad escolar es espacio central para prevenir y detectar las diferentes formas de violencia sexual que pudieran estar viviendo niñas y niños, dado el contacto cotidiano y directo, así como el nivel de conocimiento que pueden tener las y los docentes y otros actores educativos respecto a cada una de las y los menores a su cargo.
“En ese sentido, es pertinente que las y los adultos cuidadores sepan qué hacer ante un caso de abuso sexual infantil. En especial, las y los docentes deben contar con una ruta o protocolo de actuación ante esta forma de violencia”, concluyó la diputada manzanillense.