Mediante una rueda de prensa con medios de comunicación, el presidente municipal de Colima, Leoncio Morán, comentó sobre los documentos recibidos en 17 de mayo por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sobre la remodelación del Auditorio Miguel de la Madrid, donde la artista Hazel Covarrubias plasmó un mural en la fachada.
En estos documentos el INAH solicitó se quitara el mural, a lo que Morán responde: “Quiero decirle a los ciudadanos de Colima que desde el principio hemos actuado de acuerdo a la ley, este caso de remodelación no es la excepción”.
Este edificio ha tenido diferentes usos a lo largo de su historia, desde un mercado hasta una central de autobuses, lo que se considera como valor histórico es la estructura y esa, señala el edil colimense, no ha sido tocada.
Cabe resaltar que en los años 90 este lugar tuvo una remodelación en la fachada, esta vez, se trató de rescatar incluso el piso original el cual es de tipo granito.
Así mismo, Locho Morán explicó como se decidió el estilo del mural y la artista que lo haría: “Ya hay antecedentes de murales en esta zona, a Hazel la conozco desde hace mucho y ella ya tenía un mural ahí, al contactarla para este me presentó dos propuestas y se eligió el más adecuado de acuerdo a lo que buscamos.”
En los documentos que el INAH entregó al edil se dice que los colores utilizados para este mural no son los establecidos por la entorno, sin embargo el aclara que “no pintamos, se plasmó una obra de arte en este mural, no es posible que el INAH que se encarga del patrimonio histórico de una ciudad intente pedir que se borre alegando que se pintó la fachada, han querido decir que esto es graffiti, aunque eso también es arte.”
Además Locho Morán resalta que los colimenses deben sentirse orgullosos de este espacio que estaba abandonado y que ahora buscarán que se convierta en un espacio emblemático de la ciudad, como punto final hizo hincapié en que este inmueble nunca ha sido declarado como histórico, siempre ha pertenecido al ayuntamiento de Colima por lo que hizo una invitación al INAH a trabajar en conjunto por el rescate de espacios y dejar a un lado las rencillas.
Por su parte, la artista Hazel Covarrubias agradece a los colimenses por los comentarios positivos hacia el mural y asegura se siente complacida de formar parte de la remodelación de este lugar.