Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colima (UdeC) y del Instituto Estatal de Cancerología del IMSS Bienestar, estudiarán el efecto contra el cáncer que tiene el té de guanábana. Dicho proyecto de investigación fue avalado por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencia y Tecnología (CONAHCYT), a través de la convocatoria “Propuestas de proyectos nacionales de investigación e incidencias 2023”.
El grupo de investigadores, encabezados por Iván Delgado Enciso, mediante el proyecto “Evaluación de la seguridad y efecto terapéutico del remedio herbolario más usado por pacientes con cáncer de mama (infusión de Guanábana Annona muricata) del Instituto Estatal de Cancerología de Colima”, buscan validar si el consumo de esta sustancia tiene o no beneficios en el tratamiento de los pacientes con cáncer.
El proyecto nace a partir de que pacientes del Instituto Estatal de Cancerología de Colima manifestaron que el consumo del té de guanábana, entre otros preparados a base de hierbas, adicional su tratamiento médico, les estaba resultando positivo. “Sabemos -dijo Delgado Enciso- que el tratamiento tradicional es un cúmulo de experiencias de muchas generaciones”.
También, comentó, “tienen claro que no todo lo natural es bueno; hay plantas que pueden ser toxicas, entonces, tenemos que analizarlas. En el caso del té de guanábana, vamos a analizar si genera un beneficio o si puede toxico, si hace que el medicamento habitual tenga un mejor beneficio, cuál es la dosis a la que se puede administrar, o si por contrario puede bloquear el tratamiento que da el médico. Es importante determinar lo anterior, por el bien de los pacientes”.
Como el cáncer es un padecimiento que involucra diversos órganos y funciones del paciente, dijo, “tenemos que cerciorarnos que este té realmente tenga un efecto benéfico”.
El hecho de que se investigue al té de guanábana, insistió Iván Delgado, “no es una recomendación para que las personas lo tomen”, sino que buscan darle sustento a este remedio, para poder decir con certeza si hace bien o si es dañino, “porque hasta el momento no podemos decir ningunas de las dos cosas, a pesar de que su consumo es recurrente entre los pacientes”.
Lo que también buscan con esta investigación es que la medicina convencional (alopática) y la medicina tradicional puedan convivir, “cuando un paciente va con el médico, no se trata de borrar su cultura, sino que la medicina debe convivir con el entorno cultural, costumbres y tradiciones, como la herbolaria, pero también tenemos que ver que esas medicinas no se contrapongan y que la tradición sea segura y beneficiosa para el paciente”.
En el proyecto participan investigadores del Instituto Estatal de Cancerología de Colima del IMSS Bienestar y la UdeC, personal de salud, así como estudiantes de maestría, doctorado y postdoctorado de ciencias Médicas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colima.