*“Si a alguien le motiva o siente empatía con lo que escribo, habré logrado el objetivo: escribir”, dijo el escritor colimense.
Esta semana se realizó otra edición más del programa de veladas poéticas “Rabo de luna”, un encuentro que coordina la destacada escritora colimense Zeydel Bernal. En dicha velada, el público asistente conoció la obra del poeta colimense Jesús Adín Valencia, quien ha recibido premios y reconocimientos nacionales e internacionales por su talento.
Zeydel Bernal dio la bienvenida a los asistentes, quienes disfrutaron de un rico café con pan, recordando que “este espacio no tiene un formato fijo y cuenta con el respaldo de la Dirección General de Difusión Cultural de la UdeC, para establecer un diálogo de ida y vuelta”.
Entre amena charla y lectura de sus poemas, Jesús Adín contó que en la poesía ha logrado cultivar grandes amistades, además de que le ha otorgado ciertas libertades: “Participo en un constante crecimiento y la poesía me ha moldeado al leerla y liberar ciertos textos. Me describiría como alguien tranquilo, pero que libera sus demonios en algún momento, y me gusta jugar con eso”, contó.
Acerca de su familia, el escritor explicó que nació en Villa de Álvarez; después, continuó, “emigramos a Tijuana y luego a San Diego. En aquellos lugares fui muy apegado a mis padres y hermanas, luego regresé a estudiar a la Facultad de Letras y Comunicación de la UdeC, y en 2010 ingresé a talleres de creación literaria”.
“Mi adolescencia la pasé en Tijuana; en mi libreta hacía trazos y dibujos, de ahí me pasé a las letras, y así di el salto a la poesía visual, aunque digan que es diseño gráfico; siempre hemos sabido que la poesía es inquieta, y jugar con la forma y fondo es lo que siempre me han intrigado”, relató.
Jesús Adín contó al público hechos significativos como su nombre, de origen bíblico, sus primeras letras de niño, de las cuales dijo no recordar nada; su incursión en la política y cómo la compagina con la poesía: “Preparo mis discursos y les incrusto metáforas, eso me ayuda en la redacción y a la gente le gusta lo que escribo. Soy fiel a una ideología, a una identidad, y quiero que me perciban como un humanista”, destacó.
Además, reveló que para él la poesía consiste en transmitir el instante: “Está en saber decir las cosas, en encontrar las palabras correctas para transmitir la emoción de ese instante; si a alguien le motiva o siente empatía con lo que escribo, habré logrado el objetivo: escribir”.
Jesús Adín Valencia es conocido por sus libros “Una llama extrema de jirones” (2015) y “Copa de Nada” (2016); además, es ganador del premio de los Juegos Florales de la Feria de Todos Santos (Colima, 2018) y del primer lugar en el concurso de Ensayo Covid-19 por la Secretaría Estatal de Cultura (2020), entre otros reconocimientos.