Ofrecieron versiones saludables de platillos tradicionales como el pozole seco, los tamales de ceniza, el tatemado y los sopitos.
Para mostrar sus aprendizajes, alumnos y alumnas de la licenciatura en Nutrición de la Universidad de Colima realizaron una exposición de alimentos y proyectos para servicios alimenticios, hace unos días en la explanada de Enfermería
Las y los estudiantes de segundo semestre presentaron platillos tradicionales del estado de Colima y sus municipios. Su objetivo fue presentarlos con alguna modificación alimenticia, pero sin perder su esencia, para que resultaran altos en nutrientes y que ayuden a mantener una buena salud y a prevenir enfermedades. Algunos platillos presentados con esta modificación fueron: pozole seco, tamales de ceniza, tatemado, sopitos, pescado frito y chilaquiles.
En entrevista, Jaime Alberto Bricio Barrios, profesor de la Facultad de Medicina en la licenciatura en Nutrición, dijo que estos proyectos son resultado de los aprendizajes de las y los jóvenes en varias materias; “por ejemplo, se ve Antropología de la nutrición, que ayuda a comprender la conducta alimentaria y conocer a la población como tal”.
También, agregó, “se ve el metabolismo de los nutrientes para que sepan, ya que están los nutrientes en el cuerpo, cómo serán aprovechados. También integramos la bromatología y química de los alimentos, que nos ayuda a saber de qué está hecho el alimento; entonces, para no aislar cada uno de estos temas, lo que hicimos fue atender una problemática real a través de propuestas de platillos con modificación alimentaria de acuerdo con lo que la población le gusta consumir”.
Alberto Bricio resaltó que, además de mantener la esencia de los platillos, se buscó aumentar la parte sostenible y el consumo responsable.
Las y los alumnos de cuarto semestre presentaron proyectos integradores para servicios de alimentos; “una cosa curiosa -comentó Alberto Bricio- es que cuando vamos a hacer una preparación responsable de estos platillos, la idea es hacerlo en una estructura bien hecha, por ejemplo, revisar cómo están construidas las cocinas, las áreas donde se separa la basura, el área donde se reciben los alimentos, los proveedores, todos estos detalles tienen que estar bien monitoreados y de hecho están verificados por Normas Oficiales Mexicanas; entonces, lo que hicieron ellos fue una propuesta a través de maquetas, donde se veían tal cual todas las áreas de los procesos y sobre todo, cómo es que se atiende todo el servicio de alimentos”.
El objetivo de impulsar a los alumnos a realizar estos eventos, dijo Alberto Bricio, “es que cuando los estudiantes conozcan la parte clínica, lo puedan aplicar en personas y en comunidades reales”.