“No es un secreto para nadie que la Universidad ha tomado un camino muy firme y decidido hacia la atención y en su caso sanción de la violencia de género dentro de la institución”, añadió la directora del CUpIEG.
“Con una reflexión y el recuento de los logros en materia de protección de derechos e igualdad de oportunidades para mujeres y hombres, conmemoremos este 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres”, fue la invitación que hizo en entrevista la directora del Centro Universitario para la Igualdad y los Estudios de Género (CUpIEG), Mayra González Flores.
El 8 de marzo, agregó, “es el gran marco para reflexionar, señalar los avances y reconocer lo que hace falta conseguir en el tema de derechos para las mujeres”. Destacó que en la actual administración del rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, se incorporó un eje transversal que ha impulsado varias actividades respecto al tema de género en docencia, investigación, extensión y en gobernanza institucional.
En cuanto a logros, detalló González Flores, “en el último año se ha realizado una intensa formación, sensibilización y capacitación del personal docente y del estudiantado para que conozcan de manera clara los elementos que intervienen cuando hablamos de igualdad de género”.
Además, dijo, “hay esfuerzos y un interés creciente en planteles universitarios porque lo ven como la forma idónea para prevenir la violencia”.
González Flores destacó que “no es un secreto para nadie que la Universidad ha tomado un camino muy firme y decidido hacia la atención y en su caso sanción de la violencia de género dentro de la institución; éste es un escenario favorable para contribuir desde el espacio universitario al tejido social”.
Otro aspecto a resaltar en el marco del 8M, dijo, es la colaboración del personal académico que cuenta con una amplia trayectoria y reconocimiento, “que se suma a los recursos humanos que nos preocupamos y ocupamos de esta temática”.
Al respecto, reconoció que todos estos logros se deben a un trabajo académico que desde hace 30 años se ha hecho en la Universidad de Colima; “contamos con perfiles muy consolidados, no sólo personas con la posibilidad de capacitar sino gente que genera conocimiento y que nos permite tener visión y una posibilidad de interpretar nuestra realidad social”.
Mayra González adjudicó al factor humano el hecho de que ahora la comunidad universitaria cuenta con instancias de reciente creación, como la Unidad para la Atención a la Discriminación y Violencia de Género, adscrita a la Abogacía General, para atender todos los casos y quejas presentadas en el marco de la discriminación y violencia de género.
El protocolo y su Comité Especializado para la Atención de la Discriminación y Violencia de Género, complementó, son otras dos instancias creadas que se integran para atender estas quejas. González Flores describió que éstas no sólo sancionan, sino que “su enfoque principal es la reeducación para transformar estas conductas”.
Sumó, al amplio esfuerzo que ya se hace en el tema, la reciente creación del Programa de Reflexión en Masculinidades para la Igualdad de Género en la Universidad de Colima, “que resulta indispensable en la atención y prevención de la violencia de género”. González Flores dijo que “identificamos situaciones de violencia y trabajamos para que las personas que puedan generarla reflexionen también y la transformen”.
En esta materia, destacó el reconocimiento que ha recibido la Universidad de otras instancias locales y regionales; “reconocen la necesidad de reunir esfuerzos, muestra de ello fue la capacitación en estos días de personal del Poder Legislativo, un punto importante porque esta instancia organiza la vida cotidiana a través de la normativa, además del trabajo muy estrecho con el Instituto Colimense de las Mujeres, como parte del Gobierno del Estado de Colima”.
La directora del CUpIEG concluyó que “la Universidad de Colima siempre apostará por la educación, y en temas de género son importantes los procesos reeducativos para desmontar y tener otra interpretación o visión”.
En el marco del 8 de marzo, finalizó, “se están generando muchas actividades que reflexionan sobre estas problemáticas y abonan en la disminución de las desigualdades; las podemos hacer más específicas de acuerdo con las diferentes áreas del conocimiento y compartirlas como herramientas útiles a todo el estudiantado para sus procesos formativos o actividades profesionales, porque es necesario ser sensibles a estos temas”.