“Esta reforma involucra a los universitarios, para tener un documento maestro que permita avanzar en esta corriente a nivel nacional y tener un posicionamiento adecuado a la propuesta curricular”: Martín Robles.
En el marco de la Ley General de Educación (LGE), que tiene como una de sus propuestas “formar mujeres y hombres como ciudadanos integrales con la capacidad de aprender a aprender en el trayecto de la vida y ser un aporte para el desarrollo de la sociedad”, se propuso a nivel federal un Marco Curricular Común de la Educación Media Superior (MCCEMS) “para responder a las necesidades actuales y futuras en un contexto de incertidumbre y de cambios tecnológicos y geopolíticos y con ello lograr capacidades ante la dinámica de actualización, innovación y desarrollo para hacer frente a las necesidades de la vida”.
De manera general, este proyecto de marco curricular busca homologar a los más de 30 diferentes subsistemas que existen en el país, con sus especificidades en enseñanza, tipos de profesores, perfiles de ingreso y egreso, “para ir más allá de lo cognitivo y desarrollar en las y los estudiantes todos los aspectos que les conforman en lo emocional, en lo físico, lo ético, lo artístico, en su historia de vida personal y social, así como en lo cívico”.
Esta propuesta, que impactará en los bachilleratos de todo el país, fue establecida y es regulada por la Secretaría de Educación Pública (SEP), mediante un acuerdo publicado el 17 de agosto de este 2022.
Para discutir la magnitud de este proyecto y cómo impacta en las diferentes regiones del país, en días pasados se realizó un panel virtual organizado por la Red Nacional de Educación Media Superior de la ANUIES y la Universidad de Colima, a través de la Dirección General de Educación Media Superior (DGEMS), en el que expertos y expertas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) y la Universidad de Guadalajara (UdeG) analizaron el “Perfil de Egreso (unificado) / Portabilidad del MCCEMS”.
Por la UdeC estuvo como moderador el Mtro. Marcial Aviña Iglesias ) y como anfitrión, en representación del rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, el Ing. Martín Jesús Robles de Anda, director general de la DGEMS. Participaron 97 asistentes de las diferentes instituciones educativas autónomas pertenecientes a la Red Nacional.
La Dra. María del Socorro Pérez Alcalá realizó la apertura de la sesión en nombre del Mtro. César Antonio Barba Delgadillo, coordinador de la Red Nacional de Educación Media Superior de la ANUIES. Ella destacó la importancia de abrir espacios para analizar y discutir el trabajo que se ha estado realizando en la construcción del Marco Curricular Común de la Educación Media Superior (MCCEMS), “porque siempre que hay reformas curriculares se parte del perfil de egreso, que es el resultado que se hace de los análisis de los diferentes contextos sociales, económicos, políticos y culturales que cobijan una propuesta curricular y enmarcan un proceso de formación en la Educación Media Superior (EMS)”.
Dijo también que el perfil de egreso “es resultado de tomar en cuenta las necesidades o contextos en los que se deben de formar a las y los estudiantes de EMS para transitar a la Educación Superior o para incorporarse al trabajo”, señalando que a partir del Marco Curricular Común (MCC) y la Reforma Integral de Educación Media Superior (RIEMS) 2007-2008, “no se ha terminado de homologar en los planes y programas de estudio la portabilidad, considerándola un reto y una deuda pendiente para la movilidad y el tránsito de los estudiantes en el Sistema Educativo Nacional (SEN)”.
En su intervención, el Ing. Martín Robles dio la bienvenida y agradeció a las y los participantes “por el análisis de un tema fundamental como el nuevo MCCEMS y de esta reforma que involucra a los universitarios, para tener un documento maestro que permita avanzar en esta corriente a nivel nacional y tener un posicionamiento adecuado a la propuesta curricular”.
La Dra. Sandra Elizabeth del Río Muñoz, de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), destacó el que se consulte a las universidades autónomas, no sólo a los subsistemas, “para transitar y dialogar sobre el MCCEMS de una forma pertinente, factible y sobre todo propicia para la educación media superior en todo el país”.
Informó que la UANL cuenta con 29 preparatorias y una matrícula de 80 mil estudiantes (incluyendo las 40 escuelas incorporadas) y comentó que “nuestro modelo académico ha contribuido de forma vanguardista con el análisis que se realiza del MCCEMS, no sólo en los contenidos académicos, sino también en el currículum ampliado y el extendido; además, actualmente estamos trabajando en el fortalecimiento del perfil docente, considerando la estrategia digital que se trabajó durante la pandemia por COVID”.
Destacó que la UANL, por la autonomía que tienen, hace cuatro años realizó cambios curriculares a sus planes de estudios con la finalidad de atender el contexto social, económico y demográfico, así como a la demanda estudiantil, por lo que incluyeron nuevas asignaturas y el modelo STEAM, “aterrizando al contexto industrial que tiene el estado al programa educativo técnico que está siendo demandado actualmente en su formación dual a través de la vinculación empresa-escuela, por lo que no podremos eliminar cuestiones como la innovación, para poder atender las competencias que va a desarrollar el estudiante y la aplicación en la vida real”.
La Dra. Eva Lilia García Escobar, de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), dijo que una vez analizado el acuerdo y las progresiones, consideraba congruentes y pertinentes las áreas de formación del MCCEMS y acordes a los elementos que integran el perfil de egreso, “puesto que está enfocado al currículum fundamental y ampliado, muy alineado a su perfil”. Sin embargo, difiere en que sea suficiente, “ya que, al realizar un análisis del acuerdo, encontramos que no es congruente con lo establecido en las progresiones”.
Además, considera que “falta integrar el liderazgo y el emprendimiento para el bachillerato general”. Respecto a los conocimientos, dijo que se retoma en la progresión un nivel alto, explicando que “las horas y actividades propuestas son insuficientes para alcanzar la meta del aprendizaje”.
Consideró importante “que permee de manera transversal el currículum fundamental (las matemáticas, la comunicación y las competencias digitales) hacia las áreas de acceso al conocimiento (las ciencias naturales, humanidades y las ciencias sociales)”. Por eso, añadió, le parece interesante la propuesta de que las competencias básicas y blandas que puedan adquirir los estudiantes, las puedan transferir al currículum ampliado (socioemocional), y comentó que, como institución, ya han cubierto y trabajado la parte socioemocional.
El Dr. Xavier Sánchez Guzmán, de la Universidad de Guadalajara (UdeG), explicó que un diseño curricular tiene el siguiente orden y los siguientes elementos: Diagnóstico, perfil de egreso, organización de los elementos del perfil de egreso, estructura curricular, enfoque para la enseñanza – aprendizaje y para la evaluación y evaluación curricular.
En este sentido, comentó que el nuevo MCCEMS se elaboró con una lógica inversa a los modelos de diseño curricular; “es decir, no aparecía el perfil de egreso en las primeras presentaciones que compartían; primero vieron cómo se podía ordenar el currículum, establecieron los componentes de currículum fundamental, currículum laboral y currículum ampliado, cada uno desglosado en recursos, áreas, ámbitos y/o competencias; una vez con estos elementos, continuaron con las progresiones y el aprendizaje de trayectoria, para concluir con el perfil de egreso”.
Sin embargo, comentó que “existe una congruencia, pertinencia y coherencia interna de los elementos que componen el MCCEMS, para atender el perfil de egreso de un plan de estudios general y/o técnico, aunque en este caso, la congruencia y pertinencia dependerán de las necesidades de cada institución y el perfil de egreso”.
Concluyó diciendo que el nuevo MCCEMS es pertinente para los perfiles de egreso que se tienen actualmente en su institución; sin embargo, “tendríamos que hacer una adaptación curricular, porque hay elementos que ahora se trabajan y que no se contemplan en la propuesta y que valdría la pena conservar, como la innovación, el emprendimiento, la comunicación en segunda lengua, argumentación y el uso de tecnologías para investigar y producir, entre otros”.
