Necesario formar nuevo público para el cine en México: A. García

 

 

*El director de la película “La historia negra del cine mexicano”, presentada en el foro Pablo Silva, habló de cómo el cine comercial hizo que se perdiera el público del cine mexicano.

 

Hace unos días, se realizó la proyección de la película “La historia negra del cine mexicano”, con la presencia del director Andrés García Franco, en el Foro Universitario “Pablo Silva García”, como parte de las gestiones entre la Universidad de Colima y Huertocinema.

 

La cinta muestra la investigación que realizó el director, en primera persona, a partir de que descubre un libro escrito por el tío de su madre, el cineasta Miguel Contreras Torres. A través de un trabajo de archivo y entrevistas, el director revela la interesante vida de este personaje y también la realidad del cine mexicano en la conocida Época de Oro.

 

En su trabajo toca temas como el monopolio de las salas de cine, la industria y sus favoritismo por cierto tipo de proyectos, los procesos con los que se enfrentaron cineastas mexicanos, las preocupaciones de los cineastas y la reacción del material publicado.

 

“La historia trágica del cine mexicano” fue ganadora en el Concurso de Ópera Prima del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC). de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

 

Al finalizar la proyección, Fernando Daza, gestor y cineasta de Huertocinema y Andrés García Franco tuvieron un diálogo entre ellos y con el público. Tras felicitarlo, la gente le preguntó al director cosas como “¿Qué tipo de dificultades o desafíos tuvo que enfrentar para que la película saliera a la luz?”, “¿Le hubiera gustado agregar alguna información o entrevista?” y “¿Desde su mirada, cómo es el cine mexicano actual?”

 

Andrés García contestó que “la película se enfrentó a sabotajes desde su creación; fue estar luchando contra producción, lanzamiento, la escuela, el financiamiento. Es un proceso natural para estos filmes, en todos sucede lo mismo. Había una energía muy fuerte, como poner el dedo en la llaga, este material es incómodo. Hace siete años, cuando comencé, me preguntaban ¿seguro vas a hablar de esto? Es una crítica para el cine comercial. Entonces, yo no pude entrar a festivales importantes del país porque, como sabemos, están financiados por esta industria”.

 

Sobre el material que pudo haber agregado, confesó que siempre sucede eso ante cualquier trabajo, “donde se comienza a hacer la depuración, seleccionas qué sí y qué no poner y eso lleva mucho tiempo”.

 

“Tuvimos que tener una persona -agrego- que se dedicara a recuperar los escaneos, fotos y videos para nombrarlos y tener una nomenclatura sistematizada, con nombre de archivo, porque si nosotros hubiéramos trabajado como lo hacemos muchos cineastas (de meter la fotografía en edición y poner la que se vea mejor, la montas y la nombras de una forma simple) nos íbamos a volver locos, no se iba a lograr lo que quisimos con esta película. Cuidamos mucho eso para que tuviera validez histórica”.

 

Para finalizar, sobre la situación del cine mexicano actual, Andrés dijo: “A mi no me interesan las personas que van a ver cine comercial, me interesan aquellas que prefieren un cine independiente, que abren las posibilidades de estar en un cineclub. Dicen que debemos recuperar el público del cine mexicano, pero ya no se puede recuperar, ya se perdió. Es formar el público porque no existe, los cines clubes sirven para mostrar nuevos formatos, propuestas y materiales de proyectos pequeños y medianos”.