*Las profesoras Angélica Rubí, Bárbara Mancera y Yudith Medina participaron en el conversatorio “Buenas prácticas docentes para la igualdad de género”, dentro de las Jornadas Académicas 2022.
En una productiva charla, las maestras Angélica Rubí Gómez Aro, Bárbara Mancera Amezcua y Yudith Marcela Medina Casillas compartieron con colegas sus buenas prácticas docentes para sensibilizar, practicar y adoptar la igualdad de género en la formación de sus alumnos y alumnas.
Con el conversatorio en línea: “Buenas prácticas docentes para la igualdad de género”, celebrado dentro de las Jornadas Académicas 2022, las profesoras relataron qué las motivó a incorporar esta perspectiva, cómo impacta en la formación de su alumnado y dieron algunos ejemplos que practican en clase.
Una de las prácticas docentes de la Dra. en Derecho Bárbara Mancera Amezcua, “es despresurizar el ideal de un abogado exitoso; a mis estudiantes a punto de egresar les planteo que el estereotipo de un abogado exitoso. hombre, blanco, delgado, usando ropa cara, no tiene nada que ver con la realidad”.
“Los ayudo -agregó- a desmontar esa idea de la abogacía como la profesión, la desvinculamos de lo económico, la basamos en valores, en el profesionalismo, y eso los ayuda a tener menos frustración por lo que hacen y lo que pueden llegar a realizar”. Mancera Amezcua explicó que, de esta manera, responde a la interrogante que se hace del gremio frecuentemente: “¿Cómo vamos a tener abogados y abogadas más sensibles y humanistas si no han experimentado esta sensación?”
Por su parte, la pedagoga Rubí Gómez aseguró que durante su práctica docente es alentador ver a sus estudiantes identificar las distintas formas de discriminación y violencia que han vivido o viven, pero que no identificaban; “cuando las ubican, las conceptualizan y describen empiezan a ejercer sus libertades y derechos”.
“Incluir la perspectiva de igualdad de género me da esperanza de que formaremos ciudadanos que hagan la diferencia afuera, que realicen un trabajo más consciente y puedan generar un espacio equitativo y armónico”, concluyó.
Yudith Marcela Medina Casillas, contadora pública por la Universidad de Colima, con diplomado en Educación, Gestión y Liderazgo Ambiental, dijo que ha buscado formas de transmitir a sus estudiantes “esta sensibilidad para que, a través de sus comportamientos, transmitan a su vez congruencia y puedan crear un entorno pacífico y armonioso. He detectado, en ejemplos particulares, que las y los jóvenes han podido construir su propia voz y adquirido seguridad”.
Lo que le interesa, agregó, independientemente del contenido académico que aborde en clase, “es incorporar la transversalidad del desarrollo sostenible y la importancia de la igualdad de género. Puedo observar su desarrollo en la inclusión del lenguaje de género, en las habilidades o competencias que van adquiriendo. Les pido que incluyan materiales no sexistas en la construcción de sus trabajos y he visto cómo, en ejemplos concretos, rompen roles de género y se vuelven más incluyentes. Se genera el respeto”.