*No se han registrado infecciones por transfusión en el Banco de Sangre.
La Secretaría de Salud y Bienestar Social informa que en el Centro Estatal de Transfusión Sanguínea no se ha presentado desde su creación -hace 28 años- ninguna infección por este procedimiento médico, no obstante que no hay una forma de garantizar al 100% que una transfusión esté libre de riesgos.
En el marco Día Mundial de la Donación de Sangre que se conmemoró recientemente, la subdirección del Banco de Sangre de la dependencia, dio a conocer que las transfusiones sanguíneas tienen riesgos infecciosos por parte del propio donador, no sólo los que indican los estudios, ya que hay bacterias, virus u hongos que pueden aparecer de manera asintomática en los donantes de sangre y no se presentan ni en los estudios ni en la exploración.
Asimismo, añadió que en la sangre hay células que pueden dar datos de incompatibilidad a pesar de que transfunden de acuerdo a los grupos sanguíneos; aun así, hay células y muchos tipos de inmunidad en el cuerpo que pueden provocar reacciones severas y comprometer la vida del paciente transfundido.
Explicó que en la institución se lleva a cabo un proceso complejo para garantizar sangre segura, el cual inicia con la promoción de que la sangre sea de donadores altruistas, ya que se ha demostrado que el tejido líquido de estos, tiene menos incidencia de enfermedades infecciosas y que son personas más sanas con mejores niveles de hemoglobina.
Se hace el reclutamiento de donadores que pasan por un interrogatorio y una exploración médica que ayuda a detectar enfermedades de transmisión sexual y factores de riesgo que pudieran ser transmitidos a través de la transfusión sanguínea.
Posteriormente la sangre pasa por un proceso de fraccionamiento en diferentes componentes, como son plaquetas, plasma, sangre, y enseguida se hace un estudio con equipos que tienen una sensibilidad del 99 %, que incluye seis enfermedades infecciosas: brucela, enfermedad de Chagas, hepatitis B y C, sífilis y VIH.
Es importante decir que para que la sangre sea segura y no exista ningún factor de riesgo al momento de transfundirla, se hace el almacenaje a las temperaturas y clasificaciones correctas en el Banco de Sangre, además de que se llevan protocolos en las unidades hospitalarias para garantizar la seguridad transfusional y que la sangre sea usada cuando sea indicada de acuerdo a las necesidades del paciente.
Posterior a la transfusión, hay un estudio de seguimiento que se tiene que hacer para las unidades de sangre, a través de sistemas hospitalarios de hemovigilancia, que ayuda a ver si hubo algún momento que pudo ponerse en riesgo la trazabilidad o problemas propios de la unidad.