*Esto en la mesa de análisis “Presión al cuerpo femenino y amor romántico”, dentro del Congreso Nacional de Estudiantes de Lingüística y Literatura del que fue sede virtual la Universidad de Colima.
“No debemos evitar la lectura de obras, cuentos o novelas que incluyan presión al cuerpo femenino y amor romántico, sino leer las que lo contengan desde una crítica y cuestionamiento”, fue una de las recomendaciones que hicieron estudiantes, promotoras de la lectura y estudiosas de la lingüística reunidas en el Congreso Nacional de Estudiantes de Lingüística y Literatura (CONELL), del que fue sede la Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima.
Esta recomendación fue dicha en la mesa de análisis: “Presión al cuerpo femenino y amor romántico”, donde Delia Urbina, Riestra Ahumada y Claudia Excaret reflexionaron en torno al género, sexualidad y cuerpo en la obra literaria de varias autoras.
Laura Delia Urbina González destacó la organización del congreso, “donde se puede problematizar no sólo el género sino el cuerpo femenino”. En su aportación hizo una comparación de los cuentos “A paso de conga”, de Wendy Guerra y “Filin”, de Chely Lima, ambas autoras cubanas.
En su análisis, Urbina González planteó la premisa de que “toda piel es una casa y todo cuerpo es un lugar”. Describe al cuerpo como “el tejido de encuentro significado por un estar en el mundo, que a su vez está determinado por su contexto geopolítico”.
Factores como la edad, género, sexo, grado de racialización o clase, aseguró, “afectarán la forma en cómo el mundo es traducido a la psique humana; de esta manera, es desde la piel que se nombra la diferencia. No existe la esencia de ser mujer única, sino que mujer y género son conceptos dinámicos”.
La estudiante de la UNAM, Mariana Riestra Ahumada, agradeció también el espacio que abrió y organizó el CONALL para reflexionar sobre el cuerpo, género y la sexualidad. Ella participó con la ponencia “Como si me estuvieran metiendo más y más adentro en un saco negro sin aire, sin salida: La depresión que habita el cuerpo femenino en ‘La campana de cristal’, de Sylvia Plath”, donde comentó el rol que la crítica ha tenido de esta novela, y abordó las representaciones de la depresión y cómo el tratamiento de esta enfermedad mental suelen estar sumamente vinculados y atravesados por el género.
Para ella, aunque existe una diferenciación en la manera que las mujeres reciben tratamiento clínico para las enfermedades mentales, “factores como el homosexualismo pueden dar lugar a sesgos en el tratamiento de la salud mental”, en referencia a la historia de Plath. En parte, dijo, “debido a la concepción de que la homosexualidad es un crimen, un padecimiento clínico o una falta a la moral”.
Claudia Excaret Santos Campuzano presentó la ponencia “Telenovelas mexicanas y novela rosa: el amor romántico como aspiración femenina en ‘El arroyo de la Llorona’, de Sandra Cisneros”. Santos Campuzano es fundadora de Libros en el Transporte, cofundadora del YouTube La Secta de los Libros, es tallerista, tiene un podcast y es creadora de contenidos.
“Las telenovelas mexicanas y la novela rosa manipulan a las mujeres para hacerlas aspirar al amor romántico”, señaló Santos Campuzano, al presentar su análisis sobre el cuento de Sandra Cisneros. Tanto las telenovelas como las novelas rosas, dijo, “son productos culturales que se dirigen a audiencias femeninas y les presentan figuras femeninas que alcanzan todas sus aspiraciones al conseguir estar con el hombre al que
aman, y estas figuras femeninas soportan cualquier adversidad para conseguir ese amor”.
Antes de finalizar, las y los espectadores de la sesión por Facebook Live pidieron recomendaciones de lecturas y obras sin presión al cuerpo femenino y amor romántico.
Al respecto, las tres coincidieron en que no es necesario buscar lecturas de este tipo.
Claudia Excaret propuso “lecturas que aborden estos temas de forma crítica, porque es una realidad la presión que tenemos sobre nuestros cuerpos y cómo en la vida real también se
nos enseña aprender sobre el amor romántico. Ella recomendó leer a Sandra Cisneros.
Urbina González también invitó a no evadir estos temas, sino “abordarlos de forma crítica en cada lectura”. Ella recomendó leer a la escritora zacatecana y contemporánea,
Maritza M. Buendia.
Riestra Ahumada fue puntual: “No podemos separar esta atención sobre el cuerpo y esta idea del amor romántico tan internalizado que tenemos de los productos culturales que
consumimos”. Piensa que es más importante pensar en narrativas que cuestionan esas construcciones y señaló a la novela “Todos los días son nuestros”, de Catalina Aguilar
Mastretta, como “una gran lectura que nos puede llevar a pensar el fin de una relación romántica y todos los personajes”.
Recomendó leer también a las escritora Celeste Ng, Sally Rooney, Kristen Roupenian, Alaide Ventura y Andrea Chapela y señaló que “nos acercamos a una época en
la literatura, en la que cada vez hay más conciencia en el efecto que los productos culturales reflejan en las personas; además, cada vez más las escritoras abordan estas temáticas y
buscan deconstruirlas de manera constante”.