La Secretaría de Salud y Bienestar Social informa que el control prenatal oportuno y periódico conforma uno de los pilares de la salud materna y fetal, por lo que sigue siendo una de las acciones fundamentales para favorecer un embarazo saludable, un parto seguro y tener un bebé y una mamá sanos.
En el marco del Día Nacional de la Salud Materna y Perinatal, la dependencia señala que los cuidados maternos han evolucionado en las últimas décadas; sin embargo, la confirmación temprana del embrazo y acudir como mínimo a 5 consultas médicas de manera mensual es fundamental para la prevención de la muerte materna.
El control prenatal debe iniciar en el primer trimestre de embarazo, idealmente durante las primeras 6 semanas, con la finalidad de identificar, detectar, prevenir y tratar factores de riesgo que puedan poner en peligro la vida de la mamá y el bebé.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la mayoría de las complicaciones durante la gestación, parto o puerperio son prevenibles o tratables y otras pueden estar presentes desde antes del embarazo, pero se agravan con la gestación, especialmente si no se tratan como parte del control prenatal periódico.
Por ello, se recomienda acudir de inmediato a control prenatal en los centros de salud y a las citas de laboratorio y ultrasonido; tomar ácido fólico (3 meses antes y durante el embarazo), y conocer e identificar los datos de alarma en el embarazo y puerperio.
Asimismo, hay que acudir al Club de Embarazo de su centro de salud; realizar con su familia un plan de seguridad para el caso de una emergencia; hacer uso de la línea 800 MATERNA para cualquier duda sobre el embarazo, puerperio o apoyo en la lactancia e incluso para reportar maltrato por parte del personal de salud.