Luce una interesante estructura antigua en la parte superior llamada “mojonera”, que se utilizaba a finales del siglo XVIII y principios del XIX, para delimitar haciendas.
La pieza ha llamado la atención por gran tamaño de 5×5 m por dos metros de altura, y su diseño de líneas y oquedades, clasificado por algunos expertos como el petroglifo más grande en el estado, posiblemente relacionado a la fase ‘Tumbas de Tiro’ de Colima, de 2 mil años de antigüedad.
Fue reportado por los fotógrafos Rafael Cruz y Jonathan Villa y Luis Orozco, oriundo del lugar.
Arqueólogos del INAH Delegación Colima ya visitaron el lugar para su estudio y elaboración de la cédula de inscripción en el Sistema Único de Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicas e Históricas del INAH, como patrimonio cultural de la nación.