Joe Biden ha llamado “Batalla por la nación” a su conjunto de propuestas para Estados Unidos donde incluye un apartado dedicado a asegurar los valores del país “como nación de inmigrantes”.
Recordemos que Biden fue el segundo al mando durante el mandato de Barack Obama y asegura que habrá cambios en los primeros 100 días donde destacan:
-Acabar con la separación de las familias. Biden promete dar marcha atrás al enjuiciamiento de inmigrantes por infracciones menores, poner fin a las redadas en los sitios de trabajo y en ubicaciones “sensibles” como hospitales, escuelas o lugares de culto, y dirigir los esfuerzos de las autoridades “hacia las amenazas a la seguridad pública y la seguridad nacional”.
-Detener las políticas de asilo de Trump. “La Administración de Trump ha trabajado en contra de esta tradición”, lamenta el candidato demócrata, al enumerar entre las decisiones de esta Administración las restricciones a quienes viajen por México y Guatemala, la intención de evitar que las víctimas de violencia doméstica y pandillas reciban asilo y el limitar esta protección para integrantes de la comunidad LGTB.
-Terminar con la detención prolongada. Frente a la detención de niños por “tiempo indefinido”, Biden apoya opciones alternativas a la privación de la libertad y respalda programas de acompañamiento de migrantes liderados por organizaciones sin fines de lucro.
-Revertir la “carga pública”. Esta norma permite denegar visados o permisos de residencia a migrantes ante la posibilidad de que requieran recurrir a programas oficiales de ayuda. “Socava el carácter de EU como tierra de oportunidades y acogida para todos, no solo para los ricos”, critica Biden.
-Restablecer el programa para los “dreamers”. Ante la que considera “cruel y contraproducente” decisión de Trump de terminar con el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que es motivo de una batalla judicial que ha llegado al Supremo, Biden promete su restablecimiento y medidas adicionales para proteger a las familias de los llamados “dreamers”.
-Rescindir prohibiciones de viaje. Desde su llegada al poder, Trump ha anunciado vetos migratorios. El primero de ellos, justo después de su toma de posesión, contra siete países de mayoría musulmana (Irán, Irak, Libia, Siria, Somalia, Sudán y el Yemen), y más recientemente, en enero pasado, a ciudadanos de Nigeria, Eritrea, Birmania y Kirguistán, mientras que excluyó a Sudán y Tanzania del programa de visados de diversidad.
Además Biden promete:
-Modernizar el sistema de inmigración de modo que abarque no solo a los latinos sino a 1.7 millones de inmigrantes indocumentados de Asia, así como “cientos de miles de Europa, Oriente Medio, África y el Caribe”.
-Una hoja de ruta para casi 11 millones de inmigrantes indocumentados.
-Cambios en el sistema de visas temporales para personas altamente cualificadas.
-Facilitar la legalización de la situación de trabajadores agrícolas.
-Conservar el sistema de lotería de visas de diversidad.
-Crear una categoría de visas otorgadas a solicitud de los consejos municipales, los condados o ciudades.
-Poner fin a los centros de detención privados y con fines de lucro.
-Restablecer el límite anual de admisión de refugiados a 125,000 desde los 18,000 actuales.
-Abordar la migración junto a los gobiernos de Canadá, El Salvador, Guatemala, Honduras y México, entre otros.
Con información publicada en https://www.forbes.com.mx/mundo-propuestas-biden-migracion/