*Gabriel Aldana, profesor de la Universidad Autónoma de Campeche dictó la conferencia “Emprendimiento en la nueva normalidad”, como parte de las actividades académicas de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias.
“Debemos entender que fracasar es sólo una forma de cómo no hacer las cosas”, dijo Juan Gabriel Aldana Perera, profesor de la Universidad Autónoma de Campeche al dar la conferencia “Emprendimiento en la nueva normalidad”, dentro de las actividades de la Jornada Académica de la Biología y Agronomía 2020 de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (FCBA), en el marco de su 44 aniversario y en los 80 años de creación de la Universidad de Colima.
Agregó, en el tema del emprendimiento antes de la pandemia del Covid-19, que en México el 68% de los mexicanos creía que un negocio era una buena opción de carrera, esto de acuerdo con información del Monitor Global de Emprendimiento (GEM, por sus siglas en inglés), respecto a la percepción que se tenía hasta el 2018.
Asimismo, dijo que los jóvenes de entre 25 y 34 años tenían un 26% de creencia que la opción del emprendimiento era lo correcto, el 46% de los encuestados conocía a alguien que había iniciado un negocio, el 70% creía tener habilidades y conocimientos para iniciar un negocio y al 47% los inhibía el miedo para iniciar un negocio.
En ese sentido, explicó que se tenía una percepción por parte del mexicano, de que había condiciones para generar negocios y empresas, “las condiciones que se tenían en el 2018 generaban un ambiente o sistema de emprendimiento con un porcentaje superior a la media mundial, pero cuando nos vamos y nos contrastamos con los puestos que tienen los recién egresados de las universidades del país, podemos ver que las universidades privadas tienen mayor porcentaje de quienes buscan o se enfocan en trabajar con temas de empresas o negocios, mientras que dos puntos abajo se encuentra la gente que egresa de las escuelas públicas. Esto obedece al enfoque que estamos dando los docentes que trabajamos en escuelas públicas y privadas con respecto a que los chicos emprendan o desarrollen alguna actividad o negocio”.
Por lo anterior, dijo, “es muy importante tener una cultura emprendedora, y eso se debe motivar en las escuelas. Existen programas universitarios para el emprendimiento; sin embargo, creo que los programas no son los adecuados; los profesionales que los imparten no tienen las herramientas ni experiencia en el desarrollo de emprendimientos y se enfocan en gran medida en desarrollar ideas y prototipos para pasar una materia, sin ir más allá”.
Aldana Perera señaló que existen numerosas herramientas que ayudan a trabajar en el proceso de generación de ideas, así como modelos de negocios preestablecidos donde los interesados pueden apoyarse para desarrollar el modelo de la propuesta que se tenga. En este tema, a nivel nacional la mayoría se enfoca en el Design Thinking, que ayuda a trabajar en el proceso de generación de ideas.
“Esto empieza –añadió– desde que uno empatiza con una idea, cómo la define y cómo la desarrolla, para ir luego al prototipo, lo que significa que la gente pueda opinar, mejorar o eliminar la propuesta y finalmente probarla en el tema económico. Así se han creado grandes empresas como Apple, airbnb, Nike, Myadtech, Uber, entre otras”.
Explicó que la clave para desarrollar los negocios, los emprendimientos y las innovaciones es la propuesta de valor. Aquí, destacó, no debe dejarse de lado el conocer y entender las megatendencias, que “son la codificación de grandes cambios sociales, políticos, culturales, educativos, económicos y tecnológicos que influyen en nuestro tiempo y lo que vendrá. Una vez que los muchachos tienen claro cómo desarrollar su propuesta de valor, el desarrollo de un modelo de negocio es muy simple, es sólo guiarle a través de una ruta y llegar a la propuesta de tener un emprendimiento”.
Agregó que deben buscarse opciones de financiamiento para el proyecto, tanto en las incubadoras como en los gobiernos estatales o municipales, y “buscar a gente experta en el tema que los ayuden a desarrollar ideas. Una vez desarrolladas, lograr que las puedan proponer a financiamiento. No tengan miedo de pedir, háganlo a pesar del miedo. Mucha gente no desarrolla esto no porque no tenga la capacidad o los conocimientos, sino porque tiene miedo a fracasar”.
Al final del día, compartió, “debemos entender que fracasar es sólo una forma de cómo no hacerlo. Es importante que los chavos tengan ese entusiasmo y esas ganas de hacer las cosas. La gente que tiene mejor percepción de sus entornos está entre los 24 y los 36 años. Son la gente que está desarrollando el mayor número de emprendimiento en este momento”.
Por último, agradeció la invitación para ser parte de estas actividades y se dijo convencido de que el emprendimiento es la clave para salir adelante de la situación que ha generado la pandemia por COVID-19.