Hoy más que nunca vivimos tiempos inéditos, nunca antes vistos. La pandemia del Covid-19 ha puesto a prueba y en muchas ocasiones, en jaque a naciones enteras, cuestionando seriamente sus instituciones, sus sistemas económico, de salud, político, social, educativo etc; es indudable los grandes cambios que está provocando en los gobiernos y en la sociedad misma. Es por ello que en estas líneas quiero reflexionar sobre el fenómeno de la excesiva información que se comparte a través de las redes sociales.
La facilidad de comunicarte y compartir información por estos medios en ésta aldea digital en la cual nos está tocando vivir es realmente increíble. Basta un click y haber creado listas de difusión para que eso que quieres compartir llegue de manera instantánea a tus contactos, lo cual es una herramienta fabulosa para muchas actividades de diferente índole. Sin embargo, como todo en la vida, cuando no se sabe utilizar una herramienta tan poderosa como ésta, es muy probable que termines dañándote o dañando a los demás.
Tal vez te preguntes ¿Vlady no estás exagerando? Compartir información no le hace daño a nadie. Hoy en estas líneas te quiero decir con toda sinceridad que puedes dañar a los demás si compartes información sin antes verificarla, sin haberla leído en su totalidad, por haberte dejado llevar solo por el título; probablemente no te diste cuenta de cuál es la fuente de la información, ni la intención de difundirla. Si no ponemos atención en estos pequeños pero grandes detalles, es muy probable que estés enviando información falsa y esto en definitiva no ayuda a nadie, al contrario, le estás haciendo un terrible daño aunque no lo sepas.
Los seres humanos, muchas veces, tomamos decisiones de manera muy rudimentaria, teniendo en cuenta aspectos muy básicos como es la experiencia, emoción e información; por tal motivo, proporcionar una información no verídica puede contribuir de manera sustancial a una toma de decisión errónea respecto al tema que se comparte; y para ejemplificarte basta con mencionarte que en medio de esta pandemia hubo mensajes (fake news) donde se afirmaba que ingiriendo pinol y cloro evitarían contagiarse de coronavirus y ¡Hubo personas que lo hicieron! Sé que este ejemplo es exagerado, pero ¡es real!
Y así, hay muchas personas que toman decisiones, reaccionan y comparten información que sus contactos les envían. Es por eso que en esta reflexión es importante resaltar que ante el gran exceso de Información Seamos Selectivos, compartamos realmente lo que merece la pena compartirse, empezando con que sea verificable, que sea útil y que nos ayude a mejorar; (parafraseado y sintetizando el triple filtro de Sócrates) en el conocimiento o información que generamos o compartimos nos retratamos nosotros mismos, construimos credibilidad o la incredibilidad en nuestra persona. La misma inteligencia se deja ver “si sabes leer entre líneas” en la información que publica y comparte cada persona.
Para concluir quiero comentar que los tiempos actuales nos demandan lo mejor de nosotros, es importante contribuir a la formación de un buen criterio y a la difusión de información útil, veraz y benéfica para todos, ante el exceso de información, un poco de sentido común ¡hay que ser selectivo!.
Con Afecto y Cariño
SERVIR PARA TRASCENDER
Miguel Vladimir Rodríguez Aguirre