*En la ceremonia, del total de títulos y cédulas que se entregaron, 12 corresponden a maestrías, dos a especialidad y 295 a egresados de licenciatura; de ellas, 307 son electrónicas y dos fueron entregadas en formato físico.
Este lunes, 309 egresados recibieron su título y cédula profesional en un acto académico que el rector José Eduardo Hernández Nava, definió como “una gala de regocijo para todos, porque esta casa de estudios entrega a la sociedad profesionistas y posgraduados capaces, formados en una educación socialmente responsable”.
Del total de títulos y cédulas que se entregaron, 12 corresponden a maestrías, dos a especialidad y 295 a egresados de licenciatura. De ese total, 307 cédulas son electrónicas y dos se entregaron en formato físico. Esta entrega se enmarca también en las actividades conmemorativas por el 80 aniversario de la UdeC.
Para los alumnos, agregó el rector, también es una gala “porque hoy culminan un tramo de su historia de vida, donde adquirieron los conocimientos necesarios para continuar su camino, en el que forjaron amistades y establecieron un vínculo imborrable con su alma mater. Y para las familias, porque éste es un logro que se cumple con el apoyo de los más cercanos”.
Hernández Nava les dijo a los jóvenes que todos ellos “son producto de un esfuerzo que ha tomado ocho décadas consolidar y que está en permanente movimiento, en constante cambio, porque ése es el signo del universitario: transformarse constantemente para que el conocimiento continúe con su camino”.
Destacó también que el total de los 295 egresados de licenciatura que recibieron su título fueron beneficiados por el programa de becas de titulación de Gobierno del Estado, por lo que envió un agradecimiento al gobernador José Ignacio Peralta Sánchez; “gracias a su confianza en la Universidad, se han podido titular 5 mil 708 jóvenes, con un apoyo de 10 millones pesos, con lo cual demuestra que la educación es una preocupación de su gobierno”.
El rector destacó a los tres ingenieros oceánicos (David Cueva, Néstor Espinosa y Alfonso Herrera) que obtuvieron doble titulación, por la Universidad de Valparaíso, Chile, y la UdeC; la primera reposición de un título y cédula profesional, tanto de licenciatura como de maestría, para Angélica María Pérez, y los casos de Diego Radillo, quien ganó medalla de bronce en un concurso universitario e internacional de Física y de Édwin García, que ganó el Premio al Desempeño de Excelencia Egel-Ceneval.
Para seguir con estos logros, dijo por último, “se requieren recursos suficientes y adecuados”, ya que gracias a dichos éxitos la UdeC “se ha posicionado como una palanca de desarrollo, pero también como transformadora de vidas y un trampolín para que muchos jóvenes puedan acceder a un futuro de mejores perspectivas”.
En su intervención, el secretario de Educación, Jaime Flores Merlo, quien asistió en representación del gobernador Ignacio Peralta, dijo que el apoyo a la educación es uno de los ejes principales del desarrollo, “por ello se mantiene el compromiso de este ambicioso programa de becas del estado de Colima, porque todo respaldo a la educación es una inversión y no un gasto, es lo mejor que se puede hacer para ampliar las oportunidades de nuestra juventud y visualizar así un mejor futuro”.
El secretario de Educación reconoció “la trascendencia de la Universidad de Colima en la vida académica cultural, social y política del estado”, por lo que reiteró su respeto a la autonomía universitaria.
A los egresados, los exhortó a continuar con su preparación hasta conseguir sus sueños, ya que la vida, dijo, “se construye de desafíos, y superarlos es lo que permite que sean algo trascendente. Construyendo su propio futuro, no defraudarán a sus padres, a su familia, pero sobre todo no se defraudarán a sí mismos. Sean ciudadanos, hombres y mujeres felices, preparados, capaces de enfrentar con éxito el futuro, pero sobre todo comprometidos con el desarrollo de nuestro estado, de nuestra gran alma mater y de nuestro país, México”.
Finalmente, en nombre de sus compañeros, Deneb Julio Heberto Carrillo Morales agradeció tanto a las autoridades universitarias como del estado por confiar en los jóvenes y creer en sus proyectos, y por otorgar becas que les permiten cumplir sus metas.
Para el ahora titulado, es un orgullo formar parte de esta comunidad universitaria, porque “año con año vemos cómo los egresados tenemos reconocimientos nacionales e internacionales e incluso innovaciones a favor de la sociedad. Es un orgullo, porque donde sea que nos paremos tenemos la confianza de tener las habilidades desarrolladas durante nuestra etapa estudiantil. Gracias a también nuestros profesores y a nuestras familias”.
A sus compañeros les pidió “ser agentes de cambio y retribuirle lo más que podamos a la sociedad. Les deseo lo mejor de los éxitos en esta vida: bailen, viajen, amen, que este mundo necesita mucho amor. Recuerden que la calidad de una universidad no se mide por sus edificios o sus jardines, sino por la calidad de sus egresados”.
El presídium estuvieron también: Christian Torres Ortiz, secretario General; Eduardo Monroy, coordinador general de Docencia; Priscilia Álvarez, delegada de Colima, Sara G. Martínez, directora general de Educación Superior; Hugo Barreto, director general de Administración Escolar; Zaret Gaytán presidenta de la FEUC; Joel Nino Jr., presidente de la FEC y Luis Enrique Zamorano, secretario general del SUTUC.