En entrevista con Felipe Santana, Presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados de Colima (Canirac) anunció que el día de hoy abrirá de nuevo el restaurante Origen Latino luego de haber sido clausurado hace unos días, esto con ayuda de Prodecon, institución ante la que solicitaron la anulación del proceso del sello: “Más que un amparo el día de antier se promovió desde temprano a través de Prodecon una queja, se buscó una anulación del proceso del sello para que el proceso legal que va a llevar el Servicio de Administración Tributaria (SAT) contra el contribuyente se lleve aparte y se pueda abrir la fuente laboral, básicamente eso es lo que se logró ya desde ayer en la tarde.”
Deja en claro que el proceso del SAT contra el restaurante seguirá llevándose a cabo, por el momento solo se pagó la multa de 1,450 pesos que el negocio debía y están en espera de los notificadores del SAT para retirar los sellos y comenzar a laborar el día de hoy: “El juzgado autorizó la anulación junto con Prodecon, quien le avisó a la autoridad administrativa del SAT pero como ya fue tarde ayer no se notificará hasta hoy.”
“El proceso es completamente legal, no es rebeldía ante el SAT”
Santana señala la prontitud de Prodecon para actuar ante esta situación como una ayuda extraordinaria para lograr esta anulación y comenta que el propietario del restaurante, Sergio Contreras, estará convocando a una rueda de prensa en próximos días para dar a conocer el avance legal.
En el transcurso de este año Origen Latino ha sido el único restaurante clausurado bajo estas condiciones.
¿Qué se aprende de este caso?
A raíz de esta situación, el presidente de Canirac Colima comenta que realizarán una jornada de capacitación a través del Colegio de Contadores y una empresa de capacitación contable para brindar este servicio a los restauranteros ya que fueron notificados que habrá revisiones permanentes a través del SAT nacional.
“Siempre hay quien pueda caer en omisiones sencillas, nos preocupa más Tecomán, Armería y Minatitlán porque son zonas donde la información contable puede tardar más en llegar”, comenta Felipe Santana.