Que gran bendición es poder escribir estas líneas y más aún que te des el tiempo de leerlas, ya que aunque a tu Ego le cueste trabajo aceptarlo están escritas para ti.
Te platico una conversación que sucedió hace mucho tiempo, se trata de una persona que después de probar éxitos, fracasos, alegrías, frustraciones, placeres, sufrimientos, mieles y amarguras, buscaba obtener la sabiduría, sin embargo, a pesar de la gran información que poseía, de sus estudios, de sus títulos, de su prestigio social, no lograba llegar a ella. En una noche de frustración extrema y cansado de tantos intentos fallidos, cayó rendido para que finalmente la sabiduría se hiciera presente frente él. Al verla, inmediatamente supo que se trataba de aquello que tanto buscaba, él sonrió, pero no le devolvieron la sonrisa, entonces preguntó: -¿Por qué eres tan difícil de encontrar?- A lo que la sabiduría respondió: -Yo vivo en la sublime humildad del alma humana, si sabes buscarme, ahí me encontrarás-¡Por favor no te vayas! dime ¿Cómo te busco? – empieza por despojarte de todas tus mentiras- fue entonces cuando la sabiduría le devolvió la sonrisa.
Realmente me encanta esta historia entorno a la sabiduría, un concepto que todos en algún momento hemos escuchado, pero realmente muy poco entendemos, cuando evocamos este concepto ¿Qué viene a tu mente? ¿Algún anciano con barbas largas?, ¿Un monje en lo alto de una montaña? ¿O tal vez pienses en alguno de los grandes iniciados de la humanidad?, sin embargo sería bueno preguntarnos: ¿Podemos visualizar la sabiduría en nuestras vidas?, seguro estoy que se nos hace más difícil, esto se debe a que vemos a este concepto como algo distante, separado de nosotros y que solo es accesible para unos pocos. Nada más alejado de la realidad, entre las múltiples definiciones de Sabiduría hay dos características que siempre están presentes:
1ra.- “Un conjunto de conocimientos profundos, mediante el estudio de la experiencia”, o mejor dicho los conocimientos realmente profundos se obtienen mediante el estudio de tu experiencia; es decir, de tu vida. Y entonces ¿cómo podemos estudiar nosotros mismos nuestra vida? Para ello es fundamental hacerlo en relación al sentido que le decidas dar, y de los conocimientos que puedas adquirir de la experiencia de otras personas cuyo sentido de vida es similar al tuyo, sin embargo esto no es nada sencillo, si decides hacerlo, te enfrentarás contigo mismo y al conjunto de mentiras que has creado sobre ti (ego).
2da.- “Facultad de actuar con sensatez, prudencia o acierto”. Poseer sabiduría conlleva en hacerla parte de ti en tu actuar, es por ello que desde mi punto de vista se componen de otros dos elementos tal y como lo menciona Ramiro Calle en su libro La enseñanza oculta de Jesús “El ave de la sabiduría tiene dos alas, una es la de la inteligencia y la otra ala es la de la compasión y la misericordia del amor”.Y es aquí donde la sabiduría muestra su verdadera esencia, en donde el estudio de tu experiencia se convierte en conocimiento profundo que se transforma en inteligencia que trasciende en acción y la acción en una manifestación sublime de Amor en el mundo.
Creo que es importante iniciar el camino para hacer presente a la sabiduría en nuestras vidas… pero recuerda “solo te devolverá la sonrisa si decides empezar por despojarte de todas tus mentiras”…
Con Afecto y Cariño
SERVIR PARA TRASCENDER
Miguel Vladimir Rodríguez Aguirre
Con información de: https://infinitologos.blogspot.com/2019/05/sabiduria.html?m=1