No cambia la cantidad de lo que se lee, sino el formato: resultado de investigación

 

 

*Los libros impresos se vinculan a la literatura y a una lectura por placer, y lo digital se asocia con la academia.

 

En el marco de las XI Jornadas de Difusión del Cuerpo Académico 67 “Sociedad, Cultura y Significación”, de la Faculta de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima, esta semana se presentó la charla “Las nuevas modalidades de la lectura en jóvenes universitarios”, impartida por la profesora de tiempo completo Aideé Arellano Ceballos y por Graciela Ceballos de la Mora, estudiante del doctorado en Ciencias Sociales que de esta Casa de Estudios.

 

Esta conferencia, explicó Aideé Arellano, es resultado de un ejercicio académico que forma parte del trabajo de tesis doctoral de Graciela Ceballos, que ella asesora y el cual aborda el tema del consumo y las prácticas de la lectura que tienen los jóvenes de esta Universidad, específicamente en el nivel superior.

 

La importancia de dicho ejercicio, dijo Aideé Arellano, “radica en la necesidad de reflexionar no sólo sobre las nuevas formas en las que los jóvenes leen, sino en conocer la percepción que ellos tiene sobre el ser lector, por lo que planteamientos como ¿los jóvenes leen igual que antes o leen distinto?, ¿leen en formato digital o en impreso?, ¿cómo se lee ahora?, son algunas de las interrogantes que nos hicimos”.

 

En este sentido, argumentó que tuvieron que construir una definición propia para este proyecto; “nosotras entendemos la lectura como las prácticas multidimensionales en que intervienen procesos de consumo, así como de apropiación y sentido de un texto por parte de un lector y que pueden realizarse desde formatos impresos y digitales”.

 

Dentro de los hallazgos en esta investigación, expuestos por Graciela Ceballos, se destacó el hecho de que los estudiantes asocien la lectura digital con cuestiones académicas, que además son percibidas como lecturas obligatorias o necesarias, mientras que los libros impresos se vinculan más a la literatura y a una lectura por placer.

 

Respecto a esto, dijo que “por lo general los alumnos prefieren leer lo relacionado a cuestiones académicas desde las pantallas, debido a que lo consideran una opción mucho más económica, accesible y segura, además de que su almacenamiento es sencillo y práctico, ya que se pueden tener varios libros en un mismo soporte y consultarlos en cualquier momento y lugar”.

 

Asimismo, compartió que aunque los estudiantes universitarios expresaron una preferencia por las lecturas impresas, varios de ellos consideran que leen más en digital, por lo que “sí existen diferencias en cómo se leía antes y como se lee ahora, pero éstas no están sólo en las cantidades de lo que se está leyendo, sino más bien en el cómo y en las maneras en las que se está leyendo”.

 

Finalmente, Aideé Arellano compartió la reflexión de que “los jóvenes, en su mayoría, asocian el concepto de ser lector al consumo frecuente de literatura impresa, dejando de lado cualquier otro tipo de práctica que actualmente y de manera habitual se realiza, como lo son las lecturas en digital de textos académicos, blogs, noticias, notas en redes sociales u otro tipo de lecturas fragmentadas que se realizan desde el celular, lap-top o tableta”.

 

La conferencia de hoy lunes, dentro de estas jornadas, será “La frase nominal con orientación educativa”, que dictará Alan Emmanuel Pérez Barajas, a las ocho de la noche, en la Casa del Archivo Histórico del Municipio de Colima.