La especialista en anestesiología del Hospital General de Zona No. 1 de la Delegación Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Colima, Martha Irazema Cárdenas Rojas, mencionó que la valoración pre anestésica, es la consulta que se les otorga a los pacientes que van a ser sometidos a una cirugía cuyo propósito dar como su nombre lo indica, una valoración del estado de salud del paciente para que entre en las mejores condiciones posibles a una intervención quirúrgica.
Mencionó que hay diferentes aspectos que deben tomarse en cuenta en una valoración pre anestésica como, los antecedentes familiares, personales, si ha tenido cirugías previas, si es alérgico algún medicamento, si ha recibido transfusiones sanguíneas, así como la exploración física para ver su vía aérea, como se encuentra la ventilación de sus pulmones, que no tenga dolor en abdomen, que no haya lesiones en su cuerpo y que tenga buen tono muscular y que sus reflejos estén íntegros. Además, se valoran los auxiliares de diagnóstico como los estudios de laboratorio o paraclínicos, electrocardiograma, rayos x, entre otros.
Cárdenas Rojas, resaltó que la valoración se realiza a todos aquellos pacientes que son sometidos a un procedimiento quirúrgico. Además, es importante para el anestesiólogo conocer la valoración por medicina interna en pacientes mayores de 40 años o en pacientes menores a esta edad pero con alguna enfermedad ya conocida, porque nos dan un panorama de la evolución y del pronóstico que puede tener un paciente, así como de la gravedad para la cirugía.
Agregó, que hay diferentes estados fisiológicos y riesgos de acuerdo a la clasificación de la American Society of Anesthesiologists (ASA), como lo son: paciente saludable no sometido a cirugía electiva, prácticamente sano que no tiene ninguna enfermedad excepto el motivo por el cual lo van a intervenir y de manera gradual van aumentado los grados hasta los pacientes que tienen enfermedades que están controladas o no controladas o que su estado físico está en riesgo, se intervenga o no quirúrgicamente, de acuerdo a esta clasificación ASA, nos da una perspectiva clara de cómo va a entrar el paciente a cirugía.
Dijo que existen diversos beneficios al realizar la valoración pre anestésica, como: conocer el estado real de salud del paciente, nos damos cuenta de algún tipo de enfermedad que tenga y que estas estén controladas, así como si requiere o no algún equipo especial para su procedimiento anestésico para tener en consideración el material adecuado para la cirugía y que entre con toda la seguridad de que se le va a otorgar la mejor atención.
La especialista en anestesiología, agregó que se hace una exploración física para ver si su condición física es óptima, además algo muy importante al consultar al paciente, nos da la oportunidad de explicarles el procedimiento anestésico tanto los beneficios como las complicaciones que puedan existir. Así, los pacientes después de la consulta se van más tranquilos y con la seguridad de lo que es el procedimiento anestésico que se va a realizar dentro del quirófano.
Algunas de los síntomas secundarios durante o después de una cirugía que puede causar, dependerá del tipo de anestesia o del procedimiento anestésico que se aplique tiene sus propios riesgos. Si hablamos de un bloqueo neuroaxial conocido habitualmente como raquia, puede ser desde dolores de cabeza intensos, alergia a medicamentos, que presenten parestesias las cuales son sensaciones extrañas en sus piernas como calambres, sensación de hormigueo, quemazón, ardor hasta debilidad muscular.
Si hablamos de una anestesia general tiene sus propios riesgos como son la alergia a medicamentos, que hagan un laríngeo espasmo o bronco espasmo, es decir, el cierre de las vías aéreas y bronco aspiración.
Para finalizar, puntualizó que el especialista en anestesiología es tan importante como el resto los especialistas que se encuentran en ese momento en el procedimiento quirúrgico, ya que el anestesiólogo es el responsable de cuidar la vida del paciente, es el que está al pendiente de que su presión este normal en todo momento, de reponer sangre si así lo requiere el paciente, de reponer los líquidos, de revisar todo el tiempo la frecuencia y ritmo cardiaco, cuida los niveles de oximetría, es decir que el paciente reciba el oxígeno y aporte adecuado todo el tiempo, en resumen es el que mantiene estabilizado al paciente en todo momento.