Holanda necesitaba ganar por ocho tantos de diferencia a Suecia y sólo Robben pareció creer en ello. El extremo del Bayern, en el ojo del huracán las últimas semanas por haber sido acusado de provocar la destitución de Ancelotti al frente del conjunto bávaro, se dedicó a jugar a fútbol y eso, pese a sus 33 años, lo sabe hacer de maravilla.
El holandés marcó un doblete ante Suecia, que acabó siendo insuficiente para clasificar para la cita mundialista. Tras ser semifinalista en 2014 y finalista en 2010, los tulipanes se quedan fuera de su segunda gran cita después de perderse la Eurocopa de Francia.
Enclavada en un grupo difícil, Holanda nunca pudo hacer frente a Francia y Suecia, que siempre fueron por delante en la clasificación. En la última fecha, sólo una goleada casi imposible ante los suecos les podría haber dado alguna opción de alcanzar la repesca. Les faltaron 6 tantos. Los suecos, por su parte, jugarán la repesca al finalizar por detrás de Francia.
Con información de Marca Claro