=La organización Semáforo Delictivo señala que el 80 por ciento de los homicidios en Colima son por esa causa.
El 72 por ciento de los homicidios que se cometieron en el primer semestre en el país son ejecuciones del crimen organizado, mientras que en Colima ese porcentaje fue rebasado hasta alcanzar un 80 por ciento, lo cual es motivado por “la lucha entre cárteles de la droga que buscan apoderarse del territorio, principalmente del Puerto de Manzanillo para la importación y exportación de drogas”.
La organización Semáforo Delictivo presentó sus estadísticas correspondientes al primer semestre del año, en la que se destaca que la violencia en el país es generada por el crimen organizado en un 72 por ciento, agregando que esta lucha en estados como Colima, Guanajuato, Nayarit, Veracruz, Baja California y Michoacán se rebasa ese porcentaje.
La violencia en Colima se relaciona con conflictos entre los brazos armados del Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel del Pacífico, liderado por los hijos del Chapo Guzmán, organizaciones criminales que buscan el control de zonas estratégicas para la importación y exportación de mariguana, cocaína, drogas sintéticas y precursores químicos.
La organización Semáforo Delictivo dio a conocer que de enero a junio de este año ocurrieron 12 mil 155 homicidios, cifra que rompe “récord histórico” ya que representa un incremento del 31 por ciento respecto al mismo semestre del año anterior y 16 por ciento más que en el primer semestre del 2011, el peor año de la administración de Felipe Calderón.
El reciente semestre “marca el fracaso contundente” de la estrategia de seguridad en México con el incremento de los delitos de mayor impacto como homicidio, secuestro, extorsión y robo de vehículos.
“Treinta estados reportan incrementos en el delito de homicidio, la mitad de ellos con aumentos superior al 30 por ciento. Las entidades con las tasas más altas son Colima, Guerrero, las dos Baja California, Sinaloa y Chihuahua”.
Dijo que de continuar con las tendencias “cerraremos el año con más de 24 mil homicidios y más de 16 mil ejecuciones, y será el peor año de la historia reciente de México.