*Entregan medalla “Ramón Saucedo Morales” al magistrado Bernardo Alfredo Salazar Santana, al distinguirse como funcionario público “por su eficiencia y honestidad”.
En el marco del festejo que realiza la Universidad de Colima por el día del Abogado, se entregó la medalla “Ramón Saucedo Morales” al magistrado Bernardo Alfredo Salazar Santana, presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, al ser, dice el reconocimiento, “un funcionario público distinguido por su eficiencia y honestidad”.
Al entregar la medalla, acompañado por Andrés Gerardo García Noriega, consejero jurídico del Poder Ejecutivo, quien asistió en representación del gobernador del estado, José Ignacio Peralta Sánchez, el rector de la UdeC, José Eduardo Hernández Nava dijo que “hoy la justicia es el primer deber del Estado moderno; la justicia como concepto humano, como garantía de paz y bienestar, como conciliadora de conflictos e intereses y como acto público orientado a paliar crisis sociales”.
Actualmente, añadió, “la sociedad espera de ustedes una verdadera vocación por la justicia. Cambiar la mentalidad, las normas, los procedimientos y la visión del derecho para lograr la solución de nuestros problemas en forma expedita, “porque la justicia que tarda, no es justicia”.
Al referirse al homenajeado, Hernández Nava destacó su desempeño como profesor de la UdeC al cubrir todos los requisitos para ser perfil PRODEP, ya que “ha realizado con empeño las actividades de la docencia, investigación, tutorías y gestión académica”.
Además, comentó que en el 2012, junto con otros destacados juristas, el magistrado “se reveló como un gran jurista por sus artículos y contribuciones al nuevo sistema de justicia penal acusatorio”, en particular las implicaciones del debido proceso, las pruebas y la defensa adecuada.
Los abogados, dijo el rector, “son actores esenciales en la conservación del orden social; si el derecho es la base de toda sociedad, entonces los abogados son la piedra angular del Estado moderno. Su rol en nuestra vida cotidiana es fundamental”.
Además, reiteró la alianza de la Universidad “por el desarrollo de Colima, para continuar aportando lo mejor de cada uno y ser parte activa en la tarea superior por la preeminencia de la ley, la justicia, la libertad y la equidad”.
“Sólo juntos: sociedad, academia, abogados y poderes de todos los niveles del Gobierno, podremos hacer efectiva la aspiración de justicia que plantea nuestra Constitución”, concluyó Eduardo Hernández.
En su intervención, Bernardo Salazar agradeció al rector y a la comunidad universitaria por el reconocimiento a su desempeño profesional y a su trayectoria como servidor público, “con una presea que reviste un símbolo especial, el cual honra a uno de los grandes promotores de la educación jurídica en la entidad: Ramón Saucedo Morales”.
Compartió con los presentes que servir a la administración de la justicia no es tarea fácil debido a las adversidades y a factores que debe enfrentar, como son la corrupción, el burocratismo, la lentitud y la indiferencia, entre otros, “los cuales confabulan para arruinar una de las mayores invenciones humanas: el derecho”.
Agregó que “es tarea de todos, como abogados, enaltecer los códigos que rigen al derecho y a las instituciones que las aplican, porque allí radica uno de los mayores compromisos de quienes estudiamos el derecho y lo volvemos objeto de nuestra vida”.
Finalmente, dijo que dicho reconocimiento lo compromete a estar preparado para contribuir al esfuerzo de atender las necesidades de la sociedad, por lo que espera que el resto de su trayectoria, tanto personal como profesional, “no traicione jamás el símbolo de esta medalla”.
Por su parte, Mario Rivera Valdez, presidente del Colegio de Abogados de Colima, señaló que se habían reunido para reconocer en los profesionales de la abogacía “su entrega y perseverancia por su trabajo en la búsqueda permanente de obtener la justicia imparcial, equitativa y completa que demanda una sociedad cada día más exigente”.
Este desayuno, añadió, “se realiza con la noble participación de la Universidad de Colima, dignamente representada por su rector, a quien su espíritu visionario y entrega plena han llevado a nuestra Universidad a un nivel de excelencia académica”.
En su turno, Esteban Meneses Ladino, presidente de la Federación de Colegios y Barras de Abogados “Rey Colimán” del Estado de Colima, mencionó que éste es un día conmemorativo dedicado a la noble profesión de la abogacía y que, como profesionistas, “debemos desempeñarnos con responsabilidad y respeto, exigiendo constantemente que prevalezca la justicia, pues somos los encargados de hacer cumplir la Constitución política y las leyes que de ellas emanen”.
A su vez, Oswy Delgado Rodríguez, presidente de la Federación de Colegios, Barras y Asociaciones de Abogados en el Estado, agradeció al rector de la Universidad de Colima “por la apertura y porque año con año nuestra institución educativa le cumple a los abogados”.
Para concluir con el evento, Andrés García Noriega, en nombre del gobernador del estado, dijo que estos eventos “honran y dignifican tanto a quienes los promueven, como a quien los recibe”. Del homenajeado, Bernardo Alfredo Salazar, destacó valores como la responsabilidad, honradez y probidad.
García Noriega felicitó al homenajeado, así como a los integrantes de los diferentes gremios de abogados por su día social y aprovechó para reiterar el compromiso que tiene el gobernador de apoyar a los abogados en la importante labor que desempeñan.
Entre otros, asistieron al desayuno Francisco J. Ceballos, presidente del Congreso del Estado; Christian Torres Ortiz, secretario general de la UdeC: Luis Enrique Zamorano, secretario general del SUTUC; Joel Nino, presidente de la FEC; Ciria Salazar, presidenta de la FEUC, Guillermina Araiza, presidenta de la ACU y Marcelino Bazán, presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionados de la UdeC.