Arturo García vive en Puebla y decidió ir a apoyar a la Selección mexicana a Rusia 2017, pero olvidó un detalle: avisarle a su esposa.
El aficionado, originario de Monterrey, Nuevo León, tomó sus cosas y le dijo a su pareja que iba “por unos cigarros al Oxxo”.
García llegó primero a Alemania y de ahí voló rumbo a Rusia para presenciar la Copa Confederaciones.
Todavía en suelo alemán, Arturo se fracturó el talón de Aquiles, por lo cual ahora anda sin su esposa, pero sí con muletas en los estadios que albergarán la Copa del Mundo del próximo año.
Luego de ser increpado por sus palabras, el aficionado tricolor insinuó que todo era broma. Sin embargo, en las redes sociales ya se volvió viral.
De: SinEmbargo.mx