La aplicación de mensajería por excelencia no solo arrastra tras de sí una popularidad enorme, también gran cantidad de polémica. Seguridad, colaboraciones con Facebook… Y gran cantidad de usuarios que ven vulnerar su privacidad por parejas, amigos, familiares… que tratan de espiar sus conversaciones.
Espiar WhatsApp es una de las búsquedas más habituales. Y lo es porque es en esta aplicación donde volcamos nuestro lado más íntimo. Lo peor es que resulta bastante fácil acceder a las conversaciones de otra persona con WhatApp Web. La empresa añadió hace pocos meses una notificación cuando se utiliza la sesión en otra parte, pero puede pasarse por alto.
WhatsApp Web, una herramienta demasiado silenciosa
La aplicación de mensajería no dispone de versión completa para ordenadores, sino que apuesta por una especie de reflejo del smartphone; que quedará comunicado con el ordenador. Esto es WhatsApp Web: basta con emparejar móvil con el navegador para que la sesión se comparta entre ambos. Mensajes, contactos, grupos, fotos… Todo aparecerá en el móvil y en el navegador.
Cualquiera que tenga acceso al móvil de la víctima podrá acceder a sus WhatsApps con solo registrar la cuenta en WhatsApp Web. Lo que en principio podría parecer complejo implica un proceso de no más de 10 segundos. Basta con que la víctima se ausente un momento para que el espía abra una pestaña de navegador con WhatsApp Web, acceda al QR de la cuenta en el móvil y empareje ambos dispositivos.
WhatsApp tiene en este punto un problema de privacidad. Avisa cuando se usa activamente la sesión, pero la notificación desaparece cuando la otra persona deja de leer los mensajes por más que la sesión siga abierta. Conviene poner el máximo de impedimentos para que nadie pueda leer nuestros mensajes. Especialmente si sospechamos que alguien cercano está interesado en leerlos.
Cómo proteger la cuenta de WhatsApp para que no se pueda espiar por web
Ya hemos visto cómo basta un simple despiste para que cualquiera registre el QR de WhatsApp con el navegador. Así que lo primero es evitar dichos despistes e ir siempre con el móvil encima. Además, es muy importante que se proteja la pantalla de bloqueo con la máxima seguridad posible. Huella si el móvil dispone de lector y/o pin de seguridad. Con otro aspecto importante: nuestra contraseña de seguridad no debe saberla nadie.
Por último, hemos de comprobar qué ordenadores están registrados en WhatsApp Web. Para ello debemos hacer lo siguiente:
- Entra en los ajustes de tu WhatsApp.
- Accede a WhatsApp Web.
- Comprueba las sesiones que tienes abiertas y, ante cualquier duda, ciérralas.
- Si ves que había una sesión abierta cuando tú no has usado WhatsApp Web en la vida, ciérrala.
Debemos realizar con cierta frecuencia estos pasos y cerrar las sesiones que no hayamos abierto. Es la única forma de mantener el control sobre uno de los aspectos más inseguros de WhatsApp.