El buen juez por su casa empieza

 

El gobernador JIPS lanza 10 medidas que según él y su gabinete le harán frente a la pésima decisión del Gobierno Federal al elevar un 20% los combustibles “gasolina y diésel” y el 4% de la energía eléctrica. Estas iniciativas que resultan claramente electoreras y populistas no ayudan a la economía de los colimenses, sino al contrario nos quieren orillar a hacer gastos innecesarios para cubrir y sanar sus atropellos en las erróneas decisiones del mandatario EPN.

El gobernador está dispuesto a sacrificar a todos los ciudadanos empresarios, amas de casa, estudiantes, comerciantes, obreros, organizaciones civiles, y políticas. Sin tocar en ningún momento a su gobierno, el cual esta infestado de corrupción y de salarios desmedidos y no pone a consideración el quitar la gasolina y automóviles de lujo a sus funcionarios, y si de ahorrar energía se trata debería de crear energía alternativa para toda su infraestructura, ya que los ciudadanos pagamos sus altos consumos de electricidad para sus aires acondicionados y sus equipos eléctricos.

No se considera ayuda la exoneración de los impuestos sobre la nómina cuando en Colima no existen creaciones de empleo y  ningún ámbito saludable para que las empresas inviertan en nuestra entidad, ya que somos un Estado catalogado como inseguro por sus altos índices de criminalidad como homicidios y robo a casa habitación.

No se puede pedir que se apriete el cinturón a los municipios cuando éstos están sin recursos y menos que apoyen a la sociedad sabiendo que no tienen de donde echar mano para esta encomienda de solidarizarse en cuanto a los problemas económicos venideros. Es absurdo pensar en programas de adultos mayores cuando aún se les debe pensiones a la mayoría de este vulnerable sector, quienes sufrieron los actos corruptos y malos manejos de la pasada y la actual administración.

Estas medidas en realidad no van a tapar ni parar la ola inflacionaria que se realiza en todos los sentidos, canasta básica, transportes y de insumos de primeras necesidades que el sector productivo necesita, y con esta ola todos sabemos que el poder adquisitivo de los ciudadanos está viéndose mermado por éste robo a mano armada del PRI Gobierno al bolsillo de los colimenses.

A Colima no solo le afecta el alza de precios en combustible sino los problemas medulares de los cuales nos tienen sumidos en uno de los Estados menos productivos y más inseguros del país siendo el primer lugar en homicidios dolosos y primer lugar en robos a casa habitación y además estar en la lista de los países internacionales como Estado no grato para ser visitado por los turistas. A su vez los ciudadanos estamos sufriendo los estragos de la pasada administración, la cual dejo a Colima sumido en la miseria al llevarse 2 mil millones y sabiendo quienes son los culpables de éste desfalco no se implementan acciones para recuperar ese dinero ni castigar a los funcionarios corruptos que participaron. Si de verdad el Gobierno del Estado quisiera ayudar a los colimenses estos dos mil millones se aportarían para subsidiar la gasolina y con ello se quedaría en un precio de $14.00 pesos durante todo el año, con esto se ayudaría a las familias de bajos recursos a restablecer su economía y de igual manera se tiene que invertir lo recaudado del avión a programas sociales de una forma transparente y a la vista pública.

El colimense espera más de sus gobernantes y quieren escuchar cómo se le defiende su patrimonio y su economía, al ver la negativa de no instruir a los diputados federales priistas en nuestro Estado para darle reversa al IEPS en las gasolinas solo se demuestra que a nuestro Gobernador no le importa la economía ni la estabilidad de Colima.

El CDE PAN Colima está en la misma dirección y en la misma estrategia que el CEN y su Presidente Ricardo Anaya, quien expuso que la solución al gravísimo problema que ha ocasionado esta decisión es muy clara y debe aplicarse con urgencia: hay que bajar los impuestos que encarecen el precio de las gasolinas, “la medida debe exigirse con firmeza pero sin violencia y sin afectar a terceros”.

Hizo un llamado al resto de las fuerzas políticas a centrar el debate en el replanteamiento de la política fiscal del actual gobierno priista, la cual ha castigado a las clases medias y a los sectores productivos del país, por ello invitó a ampliar y apoyar la propuesta del Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados, para reducir el IEPS en 50 por ciento y asimismo a todos los Grupos Parlamentarios de sus Estado a que hagan lo mismo para reducir este impuesto.