La mayor eficiencia y el efectivo uso de recursos financieros tras la implementación del nuevo modelo de gestión en la Secretaría de Salud y Bienestar Social, ha permitido un ahorro de 63 millones 548 mil pesos en adjudicaciones y adquisiciones, informó Carlos Salazar Silva, titular de la dependencia.
Al comparecer ante el Congreso del Estado para ampliar la información del Primer Informe de Gobierno, el funcionario estatal consideró necesario modificar varias inercias relacionadas con la asignación, disposición y gestión oportuna de los recursos.
Informó que bajo los principios de transparencia y rendición de cuentas instruidos por el gobernador José Ignacio Peralta, se lograron ahorros por 39 millones 584 mil pesos con la licitación pública nacional que dio origen al equipamiento de los laboratorios y unidades médicas de Estado.
En tanto que para equipar el Hospital Materno Infantil (HMI), gracias al nuevo modelo de gestión en la Secretaría de Salud se generaron ahorros por 24 millones de pesos, los cuales serán reinvertidos en equipo médico para las unidades de salud del estado.
Explicó que la licitación pública internacional para equipar el HMI fue cancelada los primeros días de enero de 2016, porque se evidenciaron irregularidades en el prodecimiento así como insuficiencia presupuestal.
Indicó que esa licitación fue por 86 millones de pesos, cantidad que hubiera permitido sólo adquirir el 70 por ciento del equipo necesario para el HMI, debido a esa insuficiencia presupuestaria es que se canceló.
Asimismo, reveló que la licitación internacional cancelada contenía insumos que estaban cotizados 250 ó 300 veces sobre el valor de mercado.
Apuntó que en la actual administración se logró lanzar una licitación pública internacional abierta, que permitó se presentaran 70 licitantes, de los que 40 quedaron registrados y 30 resultaron ganadores, representando el ahorro total de los 24 millones de pesos para la federación y el equipamiento total del HMI.
Mencionó que en el periodo informado se han invertido 110 millones 980 mil pesos en infraestructura física en salud, de los cuales 109 millones 920 mil pesos fueron en unidades de segundo nivel, 250 mil en las de primer nivel y 810 mil pesos en unidades de apoyo.
Refirió que se promueve mayor cobertura de servicios de salud a la población, de ahí que actualmente se tienen incorporadas a 283 mil 552 personas al Seguro Popular de las cuales no se recibe ningún recurso, pero representan 24 millones de pesos que la entidad deja de percibir cada año.
Carlos Salazar expuso que se promovieron acciones anticipatorias de saneamiento básico para la eliminación de criaderos del vector a través de la campaña “#YoMeSumo” contra el dengue, chikungunya y zika, la cual incluyó acciones de saneamiento básico y fumigación.
A pregunta expresa de diputados locales, Carlos Salazar expuso que a su llegada a la Secretaría de Salud se encontró con la obsolescencia de todos los equipos médicos, pues equipamiento con una vida media de 2 ó 3 años, se recibió con 6 y hasta siete años de uso.
Asimismo, expuso el hallazgo en el faltante de equipo que fue sustraído y vendido como chatarra. Así ocurrió con aires acondicionados y con el apartarayos del Hospital Regional Universitario, lo cual generó que en las primeras tormentas del temporal de lluvias dañará equipo.
Carlos Salazar mencionó también la existencia de demandas laborales que se tenían sin sustento, pero se perdieron por un seguimiento jurídico inadecuado, ya que ese personal demandado era de la propia área jurídica, cuyo perjuicio económico suma los 900 mil pesos.
Dijo que la SS tiene un rezago en equipamiento por 300 millones de pesos, “tenemos un déficit financiero para poder cubrir a proveedores desde el año 2010 al 2015”, se tiene un déficit económico porque no se establecieron las previsiones financieras para el pago de prestaciones laborales contenidas en el contrato colectivo.
Aseguró que se pagaba a proveedores a sobreprecio, quizás en el entendido que se les liquidaría a largo plazo.
Dijo que el análisis hecho hasta el momento arroja que el organismo público descentralizado llamado Secretaría de Salud, al cierre de junio tiene un déficit de alrededor de 500 millones de pesos, sin contar reparaciones o cambio de equipos.