El titular del Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental, Armando Zamora González, admitió que las discrepancias entre los informes de resultados de la cuenta pública del año 2015 entregados al Congreso del Estado y los publicados en la página web del Osafig, han generado desconfianza.
Reunido en la sala de juntas con diputados locales, el Auditor Superior reconoció también que los errores no tienen justificación alguna, aunque señaló que lo realizado en el Órgano desde su ingreso, ha implicado un esquema de trabajo diferente al que se había realizado, al practicar tres auditorías excepcionales.
Cuestionado en torno a si el personal que labora en la institución es de su total confianza, Zamora González dijo que no puede hablar de desconfianza hacia los funcionarios del Osafig, “esto que sucedió tendrá que tener su explicación”.
Agregó. “Esta situación genera una dinámica totalmente negativa. Creo que es importante que se aclare y se llegue a una conclusión sobre qué fue lo que sucedió”.
En ese sentido, indicó que ya se han hecho ajustes y deberán hacerse más, pues la materia fiscal implica áreas de especialización, como la auditoría forense y las nuevas áreas que genera la nueva Ley Anticorrupción.
Respecto a la filiación partidista de la gente que labora en el órgano fiscalizador, dijo que hay de dos o tres partidos políticos, “tengo identificadas a todas las personas y si les doy una lista del personal y consultan los padrones de cada partido, nos daremos cuenta”.
Con relación a sus dichos sobre que al interior del Osafig habría mano negra, Armando Zamora negó haber hecho una declaración en ese sentido, “me lo puso en la boca uno de los amigos reporteros y de ahí me dijeron que yo lo dije”.
Sin embargo, mencionó que “hay ahí una situación rara que voy a aclararla, la tengo que aclarar. Debe haber sanciones, acciones y aclaraciones. Este tema lo voy a aclarar en su momento y lo haré del conocimiento de ustedes”.
Sobre las discrepancias entre los informes de las cuentas púbicas entregados al Congreso el 29 de septiembre y los publicados en internet el dos de octubre, el Auditor Superior leyó un oficio dirigido al presidente de la Comisión de Hacienda, Presupuesto y Fiscalización de los Recursos Públicos, Santiago Chávez Chávez.
En el oficio, Armando Zamora señala que los informes de resultados de las cuentas públicas válidos, son los entregados a esa Comisión de Hacienda, no los publicados en internet, a los cuales deberá otorgárseles el valor jurídico, pues los que se encuentran en la página web corresponden a una versión no actualizada.
En ese documento, el Auditor Superior aseguró que su actuación no tiene dolo, mala fe o negligencia y que ha girado las instrucciones para actualizar los informes en el sitio web y para realizar una investigación a cerca de las causas por las cuales se presentaron las inconsistencias en los informes.
La diputada Martha Sosa Govea dijo que esa respuesta por escrito da tranquilidad porque se están enfrentando los hechos que pudieron haber suscitado las discrepancias; sin embargo, el diputado Guadalupe Benavides Florián señaló que en la reunión de la Comisión de Hacienda del pasado lunes, el Auditor Superior dijo que los informes válidos eran los publicados en internet.
Por su parte, Armando Zamora señaló que “ninguna explicación que yo les vaya a dar va a justificar un error y no quiero presentar excusas de algo que está a la vista”.
En ese sentido, pidió comprensión a lo hecho en el Osafig desde su ingreso, lo que ha implicado un esquema de trabajo diferente al que se ha venido realizado, pues en este 2016 se han practicado tres auditorías excepcionales.
Admitió también que el motivo por el que acudió este jueves al Congreso del Estado, la discrepancia en los informes de cuentas públicas, ha generado desconfianza, y esos “es lo que menos quiero, es lo que menos me interesa”.
Por su parte, Nicolás Contreras Cortés recordó que en esa reunión de trabajo del pasado lunes, Armando Zamora reconoció la existencia de discrepancias de fondo y no de forma en 10 de las 12 auditorías que presentan errores, “lo cual es delicado”.
Indicó que el responsable de los errores es el Auditor Superior, de acuerdo a lo establecido en el artículo 116 de la Constitución de Colima, y recordó que para el año 2016 el Congreso del Estado le incrementó el presupuesto en casi 9 millones de pesos, esto para poder liquidar a gente no apta y para contratar gente de confianza y lealtad al titular del Osafig.
Contreras Cortés dijo preocuparle el golpe en la credibilidad al órgano fiscalizador, los tiempos de entrega de la auditoría excepcional a los años 2013 y 2014 de la administración del exgobernador Mario Anguiano y los días que quedarán para que dictaminen las comisiones, primero la de Hacienda y enseguida la de Responsabilidades, antes de que prescriban las probables sanciones.
Con relación a la responsabilidad por los informes de cuentas públicas discrepantes, Sosa Govea señaló el artículo 177 de la Constitución de Colima: “La falta de cumplimiento de estos preceptos será causa de responsabilidad del titular del Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental del Estado y de los funcionarios del mismo”.
En ese sentido, la diputada Sosa señaló que no todo es el Auditor y no nada más es el Auditor, está en la Constitución, por lo que los auditores y el personal técnico de mandos medios tiene responsabilidad.