Un guardia de seguridad privado fue detenido tras atacar sexualmente a una bombero que estaba dormida dentro del velódromo situado en el Parque Olímpico de Río de Janeiro, informó el lunes la policía.
“En la madrugada de ayer, 31 de julio, fue preso en flagrante delito un agente de seguridad de una empresa que presta servicios en el velódromo del Parque Olímpico, sospechoso de abusar sexualmente de una bombero civil”, dijo la policía en un comunicado.
La bombero dormía en el alojamiento del velódromo cuando fue atacada en medio de la madrugada, “y en esta condición no pudo ofrecer resistencia”, precisó.
El agresor puede enfrentar a una pena de dos a seis años de cárcel si es sentenciado por el delito de ataque sexual de una persona vulnerable.
Miles de guardias de seguridad privados trabajan en los Juegos Olímpicos de Río, que comienzan el 5 de agosto. Un total de 85.000 militares y policías están a cargo de la vigilancia de la ciudad durante los Juegos, el doble que en Londres-2012 y un récord histórico para cualquier Olimpíada.
Brasil registra altísimas tasas de violencia contra las mujeres. Según expertos y movimientos feministas, en el país impera una “cultura de la violación” que fomenta estos crímenes.
Según datos recopilados por la reconocida ONG Foro de Seguridad Pública, en 2014 la policía brasileña registró una agresión sexual cada 11 minutos.