Postulación de Enrique Ochoa para dirigir al PRI, aberrante sumisión: Ulises Ruiz

A unas horas de que se lleve a cabo el registro de Enrique Ochoa como aspirante a la presidencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, propuso declarar desierta la convocatoria y llamar a una elección directa organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE).

 

En una carta enviada a la dirigente interina del partido, Carolina Monroy, y al “aspirante designado”, el también delegado del CEN en Quintana Roo, sostuvo que la convocatoria se debe abrir, sin destapes previos, a todos los cuadros del partido que consideren tener los atributos para conducirlo y no, como es el caso, con las ya clásicas señales que dirigen la mirada hacia un “extraordinario priista” que surge de la chistera de las cúpulas.

 

En su misiva, Ruiz Ortiz refirió que nadie duda de la capacidad de Ochoa Reza como tecnócrata y sí de su capacidad o habilidades como político y destacó que queda claro que en las “formas que se están empleando, no habrá competencia real y sólo una aberrante sumisión y una obediencia vergonzante a la voluntad superior”.

 

Del mismo modo, subrayó que si el ex titular de la Comisión Federal de Electricidad tiene el apoyo de las mayorías, por qué no confirmarlo en las urnas.

 

Agregó que el PRI cuenta con un gran número de cuadros con la capacidad y experiencia, con el conocimiento histórico del partido y las ideas claras para conducirle y subrayó que la participación de la militancia y los simpatizantes en estos momentos le daría a la nueva dirigencia el peso moral que sólo otorga el apoyo no de un Consejo Político reducido a su mínima expresión en recientes reformas, sino de millones de mexicanas y mexicanos que todavía pertenecen o simpatizan con ese instituto político.

 

Finalmente, Ulises Ruiz confió en que el aspirante designado y el Consejo Político sean capaces, con altura de miras, de tomar la decisión de ir a las urnas, al tiempo en el que manifestó que el futuro del PRI está en sus manos.