La fiscalía española quiere que Neymar sea procesado por fraude por supuestas irregularidades que involucran su transferencia al Barcelona hace tres años.
Neymar y su padre, quien también es su agente, habrían cometido fraude al intentar ocultar la verdadera cantidad de su transferencia para poder pagar una comisión más baja a la compañía que en ese momento poseía parte de sus derechos, según informaron fiscales el martes.
Un juez analizará la demanda de los fiscales y decidirá si instala el juicio. Neymar y su padre podrían enfrentar una pena de cárcel de dos años o más.
Ellos mantuvieron su inocencia cuando comparecieron ante un juez en febrero en Madrid.
Los fiscales también citaron al Barcelona y a su expresidente, Sandro Rosell, así como al expresidente del club de fútbol brasileño Santos. Ellos han negado cualquier irregularidad.
El grupo de inversión brasileño DIS afirma que resultó financieramente afectado, ya que el Barcelona y Neymar supuestamente ocultaron la verdadera cantidad de la cuota de transferencia cuando salió del Santos en 2013, así que recibió una menor compensación de la que tenía derecho.
Oficialmente el Santos recibió 17.1 millones de euros por la transferencia de Neymar al Barcelona, pero los fiscales afirman que la cantidad total pagada por el club español fue de 25.1 millones de euros, lo que significa que DIS tendría derecho a 3.2 millones de euros más.
Los fiscales dijeron que la diferencia resulta de pagos realizados por el Barcelona para futuras adquisiciones de otros jugadores, así como la asociación para celebrar partidos amistosos entre los clubes.
Según los documentos, DIS pagó cinco millones de reales brasileños (1.3 millones de dólares) por el 40 por ciento de los derechos de Neymar en 2009.
El Barcelona informó que el costo total para el club por la transferencia de Neymar fue de 57,1 millones de euros, con 17 millones de euros para el equipo y 40 millones de euros para una empresa propiedad del padre del jugador. Las investigaciones en España afirman que el Barcelona gastó más de 80 millones de euros para adquirir a la estrella brasileña.
Documentos del tribunal indican que el contrato de Neymar con el Santos, que era válido hasta julio de 2014, tenía una cláusula de recisión de 65 millones de euros, pero el club autorizó al padre de Neymar a negociar con otros clubes antes de que expirara el contrato.
Ellos alcanzaron un acuerdo con el Barcelona y el club pagó 10 millones de euros como anticipo al padre del jugador en 2011 para garantizar que lo firmarían.