Conoce la historia de “Rucio Capucha” el perro que luchaba junto a los chilenos en Plaza Italia

Rucio Capucha es un perro sin hogar que rondaba la Plaza Italia en Chile, desde que empezaron las manifestaciones luchaba con el pueblo al grado de ser herido en varias ocasiones, hoy la historia cambia para Rucio, será adoptado por una familia, cambiando su destino para siempre.

En redes sociales se ha viralizado este texto donde se relata la historia completa de Rucio:

“Este es el Rucio Capucha. Algunos dicen que es la reencarnación del Negro Matapacos, otros creemos que no.
Desde hace mucho tiempo, está de punto fijo en Plaza Italia, siguiendo al guanaco, aguantado todas las lagrimógenas y chorros de agua que vienen de los “pacos”.
En primera fila, con el “pueblo”.
Atento a la lucha, al desorden, a la pelea.

Y aunque puede sonar super romántico, no lo es. Porque cuando todos se van a sus casas, el se queda solito.
El “pueblo” con el que lucha, se olvida de él.
No tiene una comida ni una cama que lo esperen todos los días. Ni alguien que le cure las heridas.

Estos días fue internado gracias a un grupo de voluntarios (instagram.com/vetssos) porque ya había sufrido varios golpes dentro de tanta revuelta.
Un guanaco le pegó con agua, en pleno lomito.

Tiene una contusión en el pulmón izquierdo, un par de heridas y un par de moretones.
Pero va a salir adelante y esta será una de sus peleas menos importante.

Este peludo de la lucha incansable tendrá una vida para recordar, pero con una familia.
Se ha concretado su adopción y saliendo del veterinario dejará el calor de las barricadas y llegará al calor del AMOR de unos humanos que también van a estar luchando, pero por su amor.

Esperamos que el recuerdo del Negro Matapacos, el Pepe y el Rucio Capucha sirvan para visibilizar el problema que tenemos como país sobre el abandono y maltrato de mascotas… y que parte de esta nueva Constitución los convierta de una vez por toda en “seres sintientes” y su protección sea real. Y no una mala broma llamada Ley de Protección Animal.

Mucha suerte en tu vida, Rucio malvado.”